La Biblioteca de Castilla-La Mancha presenta una refrescante exposición en el pasillo Borbón-Lorenzana. Se trata de dos colecciones de materiales efímeros: librillos de papel de fumar y papeles de envoltorios de caramelos. En la primera de ellas se cuenta una muy peculiar historia de España desde la Antigüedad hasta Felipe V y en la segunda se muestran diferentes motivos ornamentales. Ambas colecciones, que son propiedad de los documentalistas y coleccionistas Jesús María Martínez e Isabel Leis, de Huete (Cuenca), acaban de ser expuestas en el Centro Miguel Delibes de Urueña-Villa del Libro, en la provincia de Valladolid. La exposición podrá verse durante todo el mes de agosto, en todo el horario de apertura de la Biblioteca (de 9 de la mañana a 9 de la noche).
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La generalización del cigarrillo, tal y como lo conocemos hoy, a finales del siglo XVIII y especialmente en las primeras décadas del XIX, propicio la fabricación de pequeñas hojas de papel especial para envolver y liar el tabaco, pequeñas hojitas que se presentaban agrupadas en librillos y que, al igual que sucede con el clásico libro, necesitaban unas tapas que las conservaran en buenas condiciones durante su uso.
Comienzan a producirse así en algunas imprentas catalanas este tipo de impresos populares caracterizados por una composición propia en cuanto al estilo y diseño de los mismos: una viñeta, un pie versificado, un friso tipográfico o no y una décima. Los grabados pueden ser xilográficos o calcográficos, estos últimos de mayor detalle y definición, y generalmente, los primeros se iluminan mediante la técnica del estarcido con una escasa paleta de colores.
Las imágenes son aprovechadas para desarrollar series más o menos amplias con temáticas diversas, desde el Quijote o la Historia de España, como la que se muestra, a la Historia de Napoleón, la fabricación del papel o temas morales o sociales, integrándose así en el ámbito cultural de otras publicaciones de este tipo como las Aleluyas o los Pliegos de Cordel.
La serie que se expone corresponde a la Historia de España y abarca desde lo que entonces se consideraba el principio de su formación (la llegada de Túbal) hasta el último reinado de Felipe V. Originalmente, se componía de 12 hojas (36,7 x 26 cms.) divididas en dos grupos de viñetas de seis que fueron adquiridas, no para guarnecer las hojas de papel, sino para componer un auténtico libro de imágenes con la Historia de España, de manera que se cortaron por la mitad y se cosieron sus 24 hojas. El resultado es el cuadernillo que ha llegado hasta hoy y que gracias a ello conocemos en su totalidad.
Los grabados y los textos son calcográficos, estampados con una sola plancha metálica por lámina, tal y como se aprecia en las huellas que ésta ha dejado en sus márgenes
Respecto a sus editores o impresores, en el pie se indica: Se vende en Barcelona debajo los arcos de los encantes en la fca. de Estampas de Nicolás Roca y María Teresa Sellent. El número de orden de la lámina se sitúa en el ángulo superior izquierdo. Nicolás Roca y María Teresa Sellent en los Encantes serán unos de los principales comerciantes de grabados y estampas a partir de 1820, junto, en aquellos años 20 a otros como Roldós, Artigas y sobre todo la Casa Estivill en la calle de la Boria.
ENVOLTORIO DE CARAMELOS
Quizá haya pocos efímeros que lo sean tanto como un papel de caramelo y, sin embargo, un soporte tan ligero será aprovechado también para imprimir en él diseños vanguardistas (art decó), escenas de zarzuelas, dichos y chascarrillos, personajes populares de dibujos animados o estrellas de cine, episodios de la Historia de España o Natural, toros y un sinfín de temas y dibujos más o menos imaginativos y coloristas.
Por su propia naturaleza, la conservación de estos pequeños impresos es muy difícil y mucho menos aun en condiciones óptimas y, aunque algunos se conservaron por su condición de coleccionables (álbumes), son muy pocos los sueltos que han llegado hasta hoy, por lo que las hojas de los muestrarios que llevaban los representantes para su distribución o aquellas otras sin cortar, tal y como salieron de las imprentas o ya cortados pero sin usar, constituyen unos valiosos documentos para su conocimiento y estudio.
Estos, serán pues, los materiales con los que se compone este pequeño montaje en el que se muestra un repertorio de envolturas de caramelos pertenecientes a las décadas de los 20 y 30 del pasado siglo constituido, principalmente, por algunas de las hojas de los muestrarios de dos distribuidores catalanes Juan Sangés Casas y Juan Guilera Vilasaló a los que se une un interesante grupo papeles de la marca La Cepedana, procedentes de la fábrica de chocolate y caramelos de Lorenzo Cabezas en Astorga (León).