Cospedal, junto a los miembros de la Real Fundación Toledo en el Palacio de Fuensalida.
La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha destacado hoy la «fructífera» labor de la Real Fundación de Toledo a lo largo de sus 25 años de vida en defensa del mantenimiento de «la riqueza cultural» de la capital castellanomanchega, ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Cospedal se ha pronunciado así en declaraciones a los periodistas tras reunirse en el Palacio de Fuensalida, sede de la Presidencia regional, con los miembros del Patronato de la Real Fundación de Toledo, presidido por Juan Ignacio de Mesa.
La presidenta castellanomanchega ha valorado el trabajo que realiza la Real Fundación de Toledo para hacer «realidad algo de lo que hoy hablamos y oímos hablar en todo momento: de la importancia de la sociedad civil, además de las instituciones públicas, a la hora de velar por nuestro patrimonio y también de dejar el legado cultural y patrimonial a las generaciones venideras».
Ha destacado que hace 25 años, cuando comenzó a funcionar la Real Fundación, «no era tan habitual que los particulares se pusieran de acuerdo en realizar una tarea filantrópica tan importante como el cuidado de una ciudad», pero ha recalcado que su labor ha sido «fructífera».
«La Real Fundación de Toledo ha influido mucho y bien durante todos estos años para que nuestra ciudad, la capital de Castilla-La Mancha y también capital de una forma de concebir la hermandad entre tres culturas, se haya mantenido intacta y muy mejorada en cuanto a su conservación», ha aseverado.
Así, ha dado la enhorabuena a los miembros de la Real Fundación por el trabajo realizado a lo largo de este periodo, que ha permitido que hoy se pueda «disfrutar» del Casco Histórico de Toledo como «uno de los más importantes de todo el mundo, el mayor de toda Europa».
«Si hoy podemos disfrutar de un legado arquitectónico y cultural tanto el punto de vista de las artes plásticas como del ambiente literario, cultural y de historia que se vive en esta ciudad es en gran medida gracias a la Real Fundación de Toledo», ha aseverado.
Esta circunstancia, ha dicho, es agradecida tanto por los vecinos de Toledo como por los de toda Castilla-La Mancha y por todos los españoles.
Con todo ello, la presidenta regional ha afirmado que el Año Greco ha sido «un ejemplo de lo que Toledo puede llegar a ser, de ser capaces de explotar» su «riqueza cultural y generar otro tipo de riqueza en forma de más turistas, de más dinamización económica y de más oportunidades para los toledanos y para todos aquellos que viven de la cultura».
«La cultura también es un gran dinamizador económico y eso ha sabido verlo también la Real Fundación de Toledo y yo se lo quiero agradecer», ha afirmado.