Trazos del alma ha conseguido ser una de los cinco cortometrajes que optará a un Premio Goya en la categoría de «Mejor Cortometraje Documental». Trazos del alma es un corto escrito y dirigido por Rafa Arroyo, protagonizado por su propia madre, María José Arroyo, y grabado en Puertollano y Poblete.
«Es el mayor homenaje que le podía dar a mi madre», confiesa el director a encastillalamancha.es, minutos después de conocer que su corto estará en la gala de la 37ª edición de los premios del cine español.
Una historia de redención y abusos sexuales
El film de Arroyo es un retrato íntimo de abusos sexuales, de violaciones, pero también de arte, de no dejar atrás el pasado y de amor profundo, que narra el proceso que ha seguido su propia madre después de sufrir abusos sexuales. «Es una película de mi madre, mi cámara y yo», cuenta Arroyo, que mientras habla por teléfono empieza a recibir los primeros mensajes.
Hace unas semanas, Arroyo contaba a este diario que «sería una alegría enorme que una historia de La Mancha esté en los Goya». Por eso, la alegría es enorme. Trazos del alma estará en los Goya.