El alcalde de Toledo ha reclamado el valor del diálogo y del consenso, «no como algo ritual», sino como «la mejor herramienta para avanzar». Emiliano García-Page ha hecho estas declaraciones en el Palacio de Congresos, en la entrega de los XVI Premios Real Fundación de Toledo que ha estado presidida por el Príncipe de Asturias y a la que ha asistido la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.
El primer edil toledano ha destacado que «lo que perdura y lo que llega es lo que se construye sobre la base de la autoestima colectiva», de ahí que añadiese que «no podemos perder de vista esa autoestima colectiva».
En la que ha sido también la inauguración oficial del Palacio de Congresos, Page ha tenido palabras para su autor, el arquitecto Rafael Moneo -«una de las mejores cosas que me han pasado ha sido conocer a Rafael Moneo; cuando le conocí supe que íbamos a terminar la obra»-, y para su antecesor en la Alcaldía, José Manuel Molina, bajo cuyo mandato arrancó el proyecto. «En el instante en que llegué al Ayuntamiento asumí la continuidad del mismo porque de niño me enseñaron que las cosas no se pueden dejar a medias».
«Este espacio hunde sus raíces en lo más profundo de la ciudad, no sólo porque haya habido que cavar mucho para construirlo, sino porque en la Edad Media en este lugar se levantaron los conjuntos palaciegos donde nació Alfonso X El Sabio«, un rey cuyo recuerdo une el alcalde al de la Escuela de Traductores, a la que ha llegado a considerar «antecedente» de la globalización. «Lo que hoy vemos como antiguo y valoramos, en sus orígenes fue vanguardia», ha proseguido, y es que «el edificio de Moneo enlaza con la esencia de esta ciudad y con aquellos que hicieron posible otras obras como la Catedral».
El alcalde entiende que en una ciudad como Toledo no se puede pasar por alto que «lo que somos hoy es la suma de todos; por eso cuando escucho eso de la pureza de sangre siempre pienso que la pureza no está en la sangre sino en el alma». Defiende que la actual generación de toledanos apuesta igualmente por seguir sumando.
El secretario de los socialistas de Castilla-La Mancha se ha dirigido también a los premiados, a los que ha expresado su reconocimiento por el esfuerzo realizado, y al Príncipe de Asturias, a quien ha agradecido su presencia siempre «reconfortable» y que en esta ocasión da «solemnidad a este gran edificio que es otro Príncipe de Asturias, un premio Príncipe de Asturias».
VEGA BAJA, EL TAJO Y EL CENTENARIO DE EL GRECO, LOS DESEOS DE LEDESMA PARA 2013
Por su parte, las primeras palabras del presidente del Patronato de la Real Fundación de Toledo, Fernando Ledesma, han sido para el Palacio de Congresos, «el vientre de El Miradero» sobre el que ha dicho que «tengo la seguridad de que será otra prueba de la maestría de Rafael Moneo».
Los seis premios otorgados en Toledo quieren expresar –ha añadido- el compromiso de la fundación con la cultura, la educación, las humanidades, el saber, la ciencia, la investigación, el progreso y el respeto a la Ley. «Hemos buscado para ello personas, instituciones públicas y privadas que concitan nuestra admiración por la defensa de tan necesarios valores, dentro y fuera de Toledo». Considera que siempre será poco cuanto se haga por la educación y la cultura, «especialmente en aquellas sociedades, como la española, en que las oportunidades no están igualmente repartidas y la carga del sacrificio recae más sobre unos que sobre otros».
Tras renovar su compromiso con la conservación y revitalización de la ciudad histórica de Toledo, Ledesma ha lanzado también sus deseos para 2013: que se produzca un avance en el tratamiento de la Vega Baja; la aprobación de una ley autonómica para la protección de los paisajes; que el río Tajo recupere «el vigor de su condición de gran río»; que la celebración en 2014 del Centenario de El Greco sirva para que Toledo potencie su significación en el mundo; «y que desde el pacto, el consenso y el diálogo seamos capaces de resolver cuanto antes los problemas de ámbito nacional que nos preocupan».