La Fonda de la Estación de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) lucirá un azulejo conmemorativo del paso del escritor danés Hans Christian Andersen, autor de cuentos como «El patito feo», «La sirenita» o «El soldadito de plomo», según ha avanzado, el concejal de Cultura Mariano Cuartero.
Cuartero ha realizado este anuncio en el acto de presentación de la Tesela de Luis Miguel Román Alhambra con el título «Alcázar de San Juan en las crónicas de viaje de Hans Christian Andersen a Julio Llamazares. Trece crónicas de viaje, de trece viajeros ilustres» que plasmaron en papel la relación de Alcázar de San Juan con el Quijote.
Será el segundo de los azulejos que recuerde la estancia en este lugar de un escritor ilustre. Hace tres años, se inauguró la inscripción que recuerda el paso de Miguel Hernández, ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.
Según ha señalado Cuartero, el Ayuntamiento de Alcázar tiene previsto instalar otros azulejos conmemorativos del paso de escritores ilustres por la ciudad. «Alcázar de San Juan y su Fonda bien merece recordar a los ilustres viajeros que han pasado por Alcázar de San Juan».
El responsable municipal de Cultura indicaba que por la ubicación geográfica, Alcázar ha sido siempre un cruce de caminos que ha ocasionado el enriquecimiento económico y cultural de la ciudad. Para Cuartero, Alcázar sigue recibiendo visitas porque «hemos sabido crear un gran atractivo cultural», que continua también en la era Covid.
La tesela «Alcázar de San Juan en las crónicas de viaje de Hans Christian Andersen a Julio Llamazares» está formada por trece crónicas de otros tantos reconocidos escritores y periodistas que plasmaron su visión de Alcázar en relación con el Quijote. El autor, Luis Miguel Román Alhambra, ha descrito su trabajo como «un pequeño mosaico formado por las percepciones que, de Alcázar como lugar relacionado con el quijote y su autor, han tenido trece viajeros que han querido dejarlas impresas en sus crónicas de viaje».
A cada uno de ellos le ha llamado la atención una imagen de su paisaje y paisanaje distintas. Son «13 teselas diferentes de una misma ciudad, Alcázar». En su tesela, Román Alhambra cuenta que los ilustres viajeros que han escrito sobre Alcázar de San Juan, todos llegaron «casi siempre de paso en su particular ruta» para descubrir lugares y paisajes de La Mancha de don Quijote.
Por orden cronológico, siglo y medio separa en el tiempo la primera crónica de Hans Christian Andersen en el año 1863, de la última, escrita por el novelista y periodista Julio Llamazares en el año 2015. En este periodo de tiempo también llegó hasta Alcázar de San Juan Rubén Darío, que en 1905 publicó la crónica «La cuna del manco», sobre la disputa Alcázar de San Juan con Alcalá de Henares por el nacimiento de Miguel de Cervantes. Señala en su tesela Román Alhambra que Darío «quiso defender, quijotescamente, la tradición cervantina alcazareña, posiblemente con más fervor que muchos alcazareños de aquel tiempo, y de ahora».
Las crónicas de Amós de Escalante, José Martínez Ruiz, Azorín, Augusto D’Halmar o Rupert Croft-Cooke forman parte también de la tesela de Román Alhambra. «Un gran trabajo de investigación y documentación» como ha calificado el presidente de la Sociedad Cervantina de Alcázar, Juan Bautista Mata que presentó el trabajo de Luis Miguel Román Alhambra, miembro también de este colectivo.