La compañía Teatro Negro Nacional de Praga presenta una adaptación libre y visual de la conocida novela de Lewis Carroll llena de color, efectos especiales, música, baile, mimos y juegos de luces en la que los espectadores harán un viaje muy especial por las joyas arquitectónicas y la riqueza de la capital de Chequia. El Teatro Auditorio de Cuenca acoge «Alicia en el país de las maravillas» el 5 de diciembre a las 20:30 horas.
«Alicia en el País de las Maravillas», protagonizada por una niña que persiguiendo a un conejo va a parar a un mundo lleno de seres alocados donde deberá enfrentarse a la dictatorial Reina de Corazones, es adaptada libremente por la compañía Teatro Negro Nacional de Praga, la cual crea una nueva historia justo donde Carroll la dejó.
A través de la fantasía, el espectador podrá acceder a dos mundos separados por un espejo con una Alicia adulta que ve a su primera niñera, su despertar a la madurez y a los conocimientos y las desilusiones de la vida, todo ello en la atmósfera de la antigua Praga, con sus joyas arquitectónicas y la riqueza de su historia secreta que se entronca con los mitos y leyendas de las culturas cristiana y judía. El público podrá sentirse así en la Catedral de San Vito o en los escondites secretos del cementerio judío, sobrevolar incluso Praga entera en la compañía de sus actores.
Con música de Petr Hapka, en esta obra no verbal los actores aparecen en un escenario completamente negro iluminado por luz ultravioleta que se torna puramente mágico, visual, lleno de efectos teatrales, una gran pantalla de proyección de animación, un sistema de vuelo, títeres y trucos originales.
«Esta compañía crea una verdadera magia visual y una inolvidable fantasía», asegura el dossier promocional de Teatro Negro Nacional de Praga, compañía fundada en la capital de Chequia tras la denominada revolución del terciopelo cuyos componentes contaban con años de experiencia en EEUU.