La compañía Els Joglars estará el próximo 8 de mayo en el Auditorio Municipal de Alcázar de San Juan con su obra «El coloquio de los perros».
Después del «Retablo de las Maravillas» y de «En un lugar de Manhattan», la admiración de esta compañía por Cervantes permanece intacta, convirtiéndose en un excelente compañero de viaje en este nuevo andar escénico de «El coloquio de los perros». En esta historia los discretos perros callejeros Cipión y Berganza fueron bendecidos por el don del habla durante una noche, cosa sobrenatural y jamás vista; sin embargo, no pudieron gozar de los adelantos que disfrutan sus actuales congéneres de cuatro patas del siglo XXI, muchos de ellos empachados de confort, consentidos como niños mal criados y colmados de atenciones y Prozac por sus rendidos dueños, situación que se da en estos tiempos actuales en que el tan nombrado estado del bien estar humano parece que se desangra por las continuas puñaladas que le han dado los bípedos de diversas variedades y especies, pecando de malicia y no escusándose con ignorancia.
Los viejos perros Cipión y Berganza, a lo largo de su periplo, han observado desde su mudez toda la condición humana, toda la miseria, todo lo ridículo de los bípedos y antes de que se les acabe la noche y les desaparezca el don del habla cuentan la realidad auténtica: que los lobos son los pastores, que la defensa ofende, que las centinelas duermen, que la confianza roba y el que os libera os mata.
Esos dos canes sabios contemplan con asombro cómo los insensatos humanos de esta sociedad se emperran en ascenderlos de su cargo de simples y dignos perros, para así poderlos tratar y tutear como si fueran personas. Seguramente su buen olfato, no en vano nacen con la nariz abierta 15 días antes de que se abran sus ojos, les ha permitido seguir en su condición de animales sin apartarse de la naturaleza. Por el contrario los bípedos llamados racionales, en su delirio mistificador y prepotente sobre el mundo animal, parece que cada vez se alejan más de ella.