Los próximos días 12, 13 y 14 de julio, Sigüenza (Guadalajara) revivirá una parte de su pasado histórico con la celebración de sus Jornadas Medievales. Este año, además, se conmemora el vigésimo aniversario desde que allá por el año 1999 la Asociación Medieval Seguntina empezara a organizarlas para exaltar el legado histórico y medieval de la Ciudad del Doncel, recordando el destierro de doña Blanca de Borbón repudiada y recluida por su esposo, Pedro I «El Cruel», en el Castillo de Sigüenza, actual Parador de Turismo. El paso del tiempo y la excelente capacidad de convocatoria de este acontecimiento, declarado de Interés Turístico Provincial, le han otorgado gran relevancia, aumentando en cada edición la participación y el número de visitantes.
La Asociación Medieval Seguntina, con el patrocinio del Ayuntamiento de Sigüenza y de la Diputación Provincial, y la colaboración de numerosas empresas locales, ha confeccionado un intenso programa con numerosas actividades pensadas para disfrutar en familia. En este carrusel de actos cohabitan eventos que se han convertido ya en tradicionales en las jornadas y otras interesantes novedades, que siempre intentan sorprender y emocionar al visitante.
Según informa desde el Consistorio en una nota de prensa, los actos se iniciarán el viernes, 12 de julio, con la presentación de los personajes que intervendrán en las Jornadas Medievales, el Hechizo de las Brujas y un concierto de música folk en la Plaza Mayor. La música medieval volverá a ser protagonista fundamental durante estos días, con numerosos conciertos en diferentes ubicaciones del casco histórico seguntino.
El sábado comenzará con el desfile medieval que partirá desde la Plaza D. Hilario Yabén para realizar un recorrido que desembocará en la Plaza del Castillo, lugar donde realmente estuvo confinada la reina doña Blanca de Borbón, personaje histórico en torno al cual se articulan las jornadas. Allí se leerá el manifiesto de la reina, para poner en antecedentes a todos los presentes. Durante toda la jornada, se sucederán numerosos actos: pasacalles, actuaciones musicales, justas a caballo, danzantes y juglares, batallas infantiles con catapultas de globos, campamentos, espectáculos de vuelo libre de rapaces o charlas de concienciación medioambiental.
También habrá exposiciones permanentes de armas en la Recepción del Parador y de aves rapaces, y la ciudad aparecerá ambientada, además, con cientos de puestos, que ofrecerán sus variadas mercaderías artesanales durante todas las jornadas, viandas, dulces, ropajes, adornos, convirtiendo a Sigüenza en un verdadero zoco medieval, con sus habitantes vestidos de época. El Mercado Medieval solamente aceptará la moneda de curso legal de entonces, “el maravedí”, que se podrá adquirir en los puestos de información de la Asociación Medieval.
Por la tarde, en las Eras del Castillo, se revivirá la llegada del Rey Pedro I y su séquito, con justas y juegos medievales a caballo, escaramuzas entre los partidarios de Pedro «El Cruel» y doña Blanca de Borbón y el posterior asalto al castillo donde los fieles a la reina intentarán liberarla. Por la noche, la Ciudad del Doncel se iluminará únicamente con la reconfortante luz de las velas, recuperando el encanto de las calles medievales, justo antes del hechizo de las brujas y el baile de las ánimas.
El domingo se iniciarán las jornadas al mismo ritmo que el día anterior, con juegos para los niños, pasacalles y la actuación de los diferentes grupos musicales. También llegará el destierro de doña Blanca, entre combates de los diferentes bandos, y el traslado de la reina a la Plaza Mayor. Las jornadas se cerrarán, a las siete de la tarde, con la obra de teatro infantil «La princesa y el dragón», patrocinada por el Ayuntamiento de Sigüenza. En definitiva, un fin de semana intenso donde la ciudad recupera su pasado esplendor, donde fue escenario de acontecimientos históricos transcendentales en el devenir y posterior futuro de España.