La Biblioteca de Castilla-La Mancha expone, hasta el próximo 31 de enero, una muestra fotográfica sobre la vida en los campamentos de refugiados sahrahuis. Los protagonistas indiscutibles, los niños y niñas que habitan en ellos, quienes han sido los encargados de realizar las fotografías para mostrar su entorno, gracias a un proyecto de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Toledo.
El proyecto se desarrolló principalmente en la zona de Hamada, una de las más áridas del desierto del Sáhara. A lo largo de un viaje de 10 días, un equipo de voluntarios de la asociación recorrieron la frontera argelina repartiendo cámaras desechables a niños de entre 8 y 12 años. «Desde su punto de vista» es el resultado de este trabajo, que ha estado coofinanciado por la Universidad de Castilla-La Mancha.
De Toledo al Sáhara para dar voz a la infancia
Con 60 cámaras desechables y 10 días de viaje por delante, la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Toledo emprendió el camino decidida a mostrar al público la realidad de estos niños. El colegio de Mahbes, Farsia, Bojador y diferentes áreas de Smara fueron algunos de sus puntos de parada. Su diario de viaje se puede consultar en la web del proyecto.
A su regreso a casa, la asociación contaban con más de 700 fotografías. Una parte de ellas se pueden ver estos días en la Biblioteca Regional: compañeros de clase, el interior de la escuela, sus casas, los animales… La exposición pretende ser una denuncia por una situación que lleva más de 40 años sin resolverse. Y quién mejor que los niños y niñas para contar en primera persona este relato.
[ze_summary text=»Una mirada pura y sin filtros que muestra la cruda realidad de su vida en el destierro»]Una mirada pura y sin filtros que muestra la cruda realidad de su vida en el destierro[/ze_summary]«Gracias a ellos y ellas podemos observar, desde su prisma, la vida familiar, sus haimas y casas de adobe, el acceso a los recursos básicos, la escuela, los animales con los que conviven, y la forma en que juegan…, una mirada pura y sin filtros que muestra la cruda realidad de su vida en el destierro», explican desde la asociación.