El artista toledano Paco Rojas abre hoy al público las salas de exposición de la Casa XIV, en la capital regional. Esta casa del siglo XIV tiene una fachada única en la ciudad (sólo existe otro vestigio en una pequeña fachada toledana). Sus esgrafiados, datados de 1350, muestran dos diseños que marcan un hito en el esgrafiado español.
Una vez en el interior de la casa a través del zaguán (que tiene un artesonado, con escudos pintados, de la misma época que la fachada), por la reja de la izquierda se accede a un espacio distribuidor. En él están las maquetas -a igual escala- del «Apostolado Greco» de Rojas: 12 esculturas de madera de 2,70 metros de altura cada una. Por la puerta de la izquierda se accede a las cuatro salas de exposiciones y, por la derecha, al estudio del pintor.
En las salas se muestra una colección de obras realizadas entre 2012 y 2015 -con excepción de cuatro esculturas «orgánicas de pie», de 1990-. Esta colección forma parte de lo que el artista relaciona con un «surrealismo abstracto». El conjunto cuenta con 39 cuadros y 10 esculturas (las cuatro citadas, en masilla de poliéster y, las otras seis, en hierro oxidado). Tanto estas obras como las colgadas en el estudio-taller (a las que el artista considera como una fórmula de «neosurrealismo») forman parte del desarrollo de la tesis plástica de Rojas: «De un lado están las seis bases expresivas (mimetismo, geometrización, surrealismos, expresionismo, abstracción y conceptualismo) y de otro lado está el eclecticismo (una multitud de posibilidades de aleaciones); en ambos lados existen ejemplos visibles desde la Antigüedad».
En el estudio de Rojas sólo hay una parte del grueso de obras «neosurrealistas» que serán expuestas, próximamente, en el Tolmo Museum de Toledo y en el Centro Federico García Lorca de Granada.