Ángel Lizcano Monedero, Benjamín Palencia, Alberto Sánchez, Gregorio Prieto, Antonio López Torres, Antonio Guijarro, Agustín Úbeda, Manuel López Villaseñor, Joaquín García Donaire, José Luis Sánchez, Amalia Avia y Antonio López García son los 12 pintores y escultores cuya obra puede disfrutarse en la Galería Marmurán de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), dentro de la exposición denominada «Figuraciones y realismos de La Mancha», una pequeña muestra de la escuela manchega, desde finales del siglo XIX, hasta nuestros días.
Las obras recogidas en esta exposición muestran la evolución de las tendencias artísticas –muchas de ellas próximas a la vanguardia- que se superpusieron a lo largo de un siglo de historia. Realismo, surrealismo, cubismo, abstracción o hiperrealismo se encuentran en la base de la creación de los 12 artistas manchegos que se acercaron a estas tendencias en la búsqueda de un estilo propio. Artistas de renombre nacional e internacional que en la actualidad son desconocidos por las generaciones más jóvenes. Acercarlos a estas generaciones es uno de los objetivos de la exposición, como explicó el propietario de la Galería Marmurán, Ángel Maroto. «Esta exposición es una gran referencia de los artistas de nuestra región, algunos tan destacados como Alberto Sánchez o Benjamín Palencia, creadores de la Escuela de Vallecas», una escuela que se acercó a la vanguardia y que tuvo continuidad en el tiempo como la Escuela de Madrid, por la que después pasaron también algunos de los autores que recoge la muestra.
La exposición fue presentada por el presidente de la Asociación Española de Críticos de Arte, Tomás Paredes, que puso en valor la dificultad de defender, en una población como Alcázar, una galería de arte privada. Igualmente señaló que «no es fácil reunir las obras que presenta esta exposición, porque todas son obras importantes, de artistas manchegos de renombre que a lo largo de la historia han aportado otra visión de esta tierra y que en pocas ocasiones se da la oportunidad de verlos juntos». Paredes hizo un alegato en defensa de la cultura y del diálogo interno y el enriquecimiento personal que despierta el arte, en unos momentos en los que lo efímero y el espectáculo lo inundan todo. «Ambas cosas son necesarias, el espectáculo y la cultura».
La alcaldesa alcazareña, Rosa Melchor, agradeció al promotor de la exposición el «regalo» que hace a la ciudad con esta muestra que realiza un recorrido por un siglo de historia y de evolución de la pintura y escultura española y europea. «La exposición pone a la ciudad en un nivel muy elevado dentro del mapa artístico y viene a demostrar que La Mancha es algo más que queso, vino y aceite; que también es arte, cultura y capacidad de creación».
La muestra podrá visitarse hasta el próximo 23 de marzo.