1-0: El CD Toledo ganó y marcó en el Salto del Caballo, que era de lo que se trataba, y respira tras lograr cuatro cuatro puntos en los dos últimos encuentros con arbitrajes más que incómodos. Una contra finiquitada por el mismo que la creó, Dani Alonso, rubricó la alegría verdiblanca al fin en el feudo local. Al árbitro andaluz Arroyo Cortés quizá no le sentó bien un informe periodístico previo y selló una labor no precisamente casera. Pero los tres puntos se quedaron en Toledo.
El Toledo fue claramente mejor que el Montañeros y no ganar habría sido calamitoso. Corría el minuto 90, Montañeros achuchaba más que nada por la inercia del marcador y el poco que tiempo que quedaba y Raúl Lozano protagonizó una de esas jugadas que se enmarcan como ejemplo de la ineptitud futbolísitica. Una veloz contra le llevó a estrellar un balón meteórico en el larguero a bocajarro, cuando lo más fácil era meter el balón en la portería. El Toledo, al fin, tenía suerte. Toda la del mundo, esta vez.
Las bajas dejaban a Alfaro con lo puesto, pero en esta ocasión con un dibujo sin estridencias: Boades en el medio, con un Javi Fernández cumpliendo sobradamente en el lateral izquierdo y Amores a pie cambiado en el lateral derecho. Diego Garrido y Dani Alonso abriendo el ataque.
Hasta bien entrada la primera parte la tónica era preocupante para los locales: había poca transición y el poco peligro llegaba por arriba, sobre todo por la banda izquierda, hasta que llegó el gol al borde del descanso tras una contra fabricada por el auto del gol, un Dani Alonso cuya sombra a partir de entonces se agigantaría hasta hacerse muy alargada. Su servicio vertiginoso lo remató Tito, rechazó el portero montañero Rafa y ahí estaba Alonso para llevar el gozo, por fin, a la grada toledana.
Tras el gol llegó la tranquilidad y en la segunda parte fueron llegando las ocasiones del Toledo sin prisa pero sin pausa, al ritmo que marcaban Boades y Dani Alonso. Cuando este fue sustituido, casi al final, sorbiendo el triunfo, pidió a la grada la explosión de alegría que todo el mundo se merecía, él quizá más que nadie.
Pero las ocasiones se fallaron. Faltó la puntería en un Toledo que por fin se limitaba a remar a favor del viento y a hacer lo que sabe hacer, con Dani Alonso retrasado para que David Sanz hiciera de 9. Y una de tantas leyes del fútbol se cumplió: no llegaba el 2-0 y el Montañeros se crecía a base de meter gente arriba y aprovecharse de la inseguridad verdiblanca.
Hasta que llegó el garrafal error de Raúl Lozano. Al Toledo, por fin, le sonreía la suerte y eso a pesar de un Arroyo Cortés que no le ayudó en absoluto, con una posible mano montañesa no pitada en el área chica y con varias tarjetas a los locales muy discutibles.
El Toledo ya respira mejor. A costa de un larguero que tronó en el minuto 90. Fue un sonido tremendo que rubricó, en un instante no deseable para cardiacos, una victoria toledana que nunca tuvo que peligrar.
1 – CD Toledo: Saavedra; Amores, Javi Sánchez (c), Alberto, Javi Fernández, Diego Ramírez, Boades, Encinas (David Danz, minuto 73), Diego Carrillo, Tito (Óscar, descanso) y Dani Alonso (Pichardo, minuto 90).
0 – Montañeros CF: Rafa, Ángel Luis (Felipe, minuto 86), Raúl Lozano, Capi (Eiroa, minuto 86), Dopico, Moisés Pereiro, Tetteh, Óscar Martínez (Jimmy, minuto 80), Jorge Cano, Rubén Rivera (c) y Javi Otero.
Gol: 1-0, minuto 38: Dani Alonso, aprovecha el rechazo del portero visitante Rafa tras el chut de Tito a consecuencia de una contra lanzada por el primero.
Árbitro: Arroyo Corrales: Demasiado quisquilloso con el CD Toledo, mostró tartejas amarillas a los locales Buades, Diego Ramírez y Dani Alonso y al visitante Raúl Lozano.
Gol:
Incidencias: Buena tarde en el Salto del Caballo. Unos 1.200 aficionados. Se podía leer una pancarta con una queja sobre los arbitrajes contra el CD Toledo.