El duelo de los equipos más jóvenes de la categoría se saldó con la victoria del CEBA Guadalajara, que se coloca como líder, tras un encuentro intenso y trepidante. Pese a ser el benjamín de la LEB Plata, el C.B. Prat puso en duros aprietos a los morados durante la segunda parte, en la que fue Solé quien salió al rescate en los minutos finales, haciendo que el equipo recobrara la confianza con dos canastas que igualaron en el marcador.
En esta ocasión, contra el C.B. Prat Joventut, los morados recuperaron la inspiración en el último momento, aunque más que por la influencia de las musas, podría decirse que fue por la actitud de Max Solé, que logró encarrilar la situación acertando dos canastas que igualaron el marcador en dos ocasiones, salvando la ventaja que había impuesto el Prat 55-55 a 4,05 minutos del final y 57-57 cuando el cronómetro estaba a 3,10 minutos. Edu Guillén sería, no obstante, quien sentenciaría el concierto con el tanto que puso al CEBA por delante (59-57), cuando faltaban 46 segundos y dos tiros libres que dejarían el marcador 61-57. La puntilla la puso Solé acertando uno de sus dos tiros libre, para llegar al final del partido con un luminoso 62-57.
Y así ocurrió una vez más. Durante la primera parte, el CEBA Guadalajara impuso su juego, con pasos cortos pero seguros. El primer cuarto fue ágil, rápido y elegante. Edu Guillén entraba a matar y si el Prat respondía con un triple (4-7) encontraba la réplica de los morados con otro de Guillén, que repetía suerte segundos después, con otro tiro de tres. No obstante, el marcador al cabo del primer cuarto mostraba un partido muy igualado (14-12).
Como de costumbre, el momento álgido del CEBA llegó en el segundo cuarto con diferencias de hasta 11 puntos, que más que por la pericia en el terreno de juego se vieron acortadas por los aciertos en los tiros libres de Nikolic llegando al descanso 34-28. El CEBA funcionó como una máquina casi perfecta, aprovechando rebotes y asistencias, que terminaban en aciertos en el aro.
A la vuelta fue cuando algo empezó a sonar mal. El Prat salió de los vestuarios imponiendo un ritmo distinto, más rápido, presionando más tanto en defensa como en ataque y los morados no supieron leer bien las notas de la partitura y empezaron a cometer fallos imperdonables. Comenzaron a perder balones de la manera más tonta, y el Prat castigaba a los morados cada vez que éstos desafinaban. Ya en el tercer cuarto, el Prat lograba ponerse por delante con dos triples (38-40) a cuatro minutos, pero la experiencia y el oficio de Javi Salson lograron salvar la situación y al cabo del mismo el luminoso reflejaba un 46-42.
El último cuarto fue casi un calco del tercero en cuanto a errores y soluciones que llegan en el último momento, para salvar el partido, esta vez de la mano de Solé, que impuso su juego dando el impulso necesario a la situación para marcar la diferencia. De nuevo el CEBA ganaba el partido con un marcador bajo y una victoria que se ha hecho de rogar pero, en el balance final, imponiendo su manera de jugar como un director de orquesta, que quizá pueda perderse en algún punto del concierto, pero que logra recuperar el control de sus músicos para ejecutar un final satisfactorio, que les coloca como líderes en la clasificación.