lunes, 25 de noviembre de 2024
28/09/2014junio 8th, 2017

El Abanca Ademar sumó este sábado su primer triunfo como local no exento de sufrimiento porque el equipo de Guadalajara tuteó a los leoneses pese a su escasez de banquillo y quizá merecieron algún premio que desperdiciaron dentro del último minuto.

La facilidad de las combinaciones, un sólido 6-0 defensivo y las aportaciones puntuales de Almeida en portería, permitieron al conjunto alcarreño al inicio disfrutar de ventajas de dos goles ante un Abanca Ademar incómodo y demasiado condescendiente en defensa.


Mientras los locales no eran capaces de sacar provecho de su superioridad numérica, su rival si lo hizo mediado el primer periodo para lograr su máxima ventaja (6-9, minuto 15), lo que llevó al técnico ademarista a solicitar un tiempo muerto que no mejoró la situación por la falta de ideas.

Más de diez minutos sin anotar y varias pérdidas en ataque se tradujeron en un parcial de 0-5 que llevó a Daniel Gordo a buscar un cambio desde la defensa con la entrada de Biosca en portería y un 5-1 con Mellado de adelantado, que al menos creó más dudas en el rival que, sin embargo, se mostraba tremendamente sólido atrás, agigantándose Almeida.

El partido dio un giro radical en los últimos minutos, las dudas del Guadalajara con más problemas ante la incomodidad de Mellado y la aportación de Biosca, unido a la sabiduría inagotable de Vega con goles inverosímiles o pases que provocaron penas máximas transformadas por Carrillo, igualaron el choque al descanso (13-13).

La tercera pena máxima anotada por el extremo leonés se tradujo en la primera ventaja local en el arranque de segundo periodo con un Ademar de cara bien diferente, bien parapetado en su cambio defensivo y con Vega siguiendo su lección magistral pese a dar sensación de lentitud, entendiéndose a la perfección con otro que vuelve por sus fueros, Mikel Aguirrezabalaga.

Un tiempo muerto de César Montes dio las claves a su equipo para leer el juego, volver a la solidez frente a Almeida y, unido al pésimo balance defensivo que propició múltiples contragolpes del Guadalajara, volteó de nuevo el encuentro del lado visitante en poco más de cinco minutos (21-23, minuto 45).

Tuvo que volver el veterano central para dar orden y encontrar a los extremos Carrillo y Kristensen -infalibles ambos- como artilleros, mientras que Guadalajara aguantaba perfectamente el envite planteando un final a cara o cruz.

Con 31-30 y poco más de un minuto para el final Montes decidió preparar el final, con un ataque decisivo y la posterior defensa, pero Chiuffa chocó con Biosca y luego incurrieron en pasividad echando por tierra su gran encuentro, porque después solo hubo tiempo para que el balón no saliera de las manos de Vega, pese a un tiempo muerto que desató los nervios de un Montes excluido.

(Visited 15 times, 1 visits today)