El conquense Pablo Andújar se clasificó, contra pronóstico, para la final del Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó, al derrotar al tercer favorito del torneo, David Ferrer, por 7-6 (6) y 6-3, en una hora y 45 minutos de partido.
El conquense, 66 del ránking ATP, jugó un enorme partido y ganó por primera vez a Ferrer, octava raqueta mundial y que hasta hoy le había vencido, sin ceder un set, las otras tres veces que se habían cruzado en el circuito.
Y eso que arrancó muy bien el cuatro veces finalista del Godó, incontestable con su servicio y dominando los puntos con golpes ganadores que le permitieron adelantarse 3-0 en el marcador.
Sin embargo, Andújar no se dejó ir, sino todo lo contrario. Empezó a jugar mejor, a tomar la iniciativa y a subir a la red a la menor ocasión para igualar el partido a cuatro juegos. El manchego incluso tuvo dos pelotas para ponerse un 4-5 y saque que Ferrer salvó.
El alicantino, que había empezado muy bien, se vio de repente dominado en la pista, corriendo de aquí para allá para salvar cada punto y maldiciendo cada error que le obligaba a cometer su rival.
Aun así, Andújar desperdiciaría tres bolas de set con 6-5 y saque y a punto estaría de cederle el primer parcial a Ferrer, cuando perdía 6-2 en el desempate.
Pero a partir de ahí, el conquense jugó de cine. Salvó cuatro bolas de set y se llevó la primera manga tras imponerse en el desempate por 8-6.
El castellanomanchego seguiría a un gran nivel al inicio del segundo, cuando volvió a romper el servicio de Ferrer para colocarse 3-0. El de Jávea no se podía creer el giro que había dado el choque.
Su entrenador, Paco Fogués, le pedía calma, mientras Ferrer intentaba regresar al partido. Ya no volvería a perder el servicio hasta el final, pero tampoco tuvo ni una oportunidad de romper el de Andújar, que sentenció las semifinales a la tercera bola de partido de la que dispuso.
Pablo Andújar se medirá mañana en su primera final barcelonesa al japonés Kei Nishikori, número 5 del mundo y vigente campeón del torneo.