Fueron el Mundial y la final soñadas. Los toledanos Jorge Maqueda y Ángel Montoro se proclamaron campeones del mundo al ganar con su Selección a Dinamarca en una final histórica por 35-19. Ha sido la mayor ventaja lograda por un campeón jamás en una final del Mundial.
Maqueda volvió a ser determinante con su juego y su entusiasmo. Logró cuatro tantos en la gran final mientras que Ángel Montoro también contribuyó a la apabullante victoria con dos tantos.
La alegría no ha podido ser mayor para los toledanos. Maqueda, que actualmente juega en el Nantes francés, se ha consolidado como uno de los jugadores básicos del combinado nacional, el máximo junto a Alberto Entrerríos.
Por su parte, Ángel Montoro ha cumplido con creces su misión de debutar con éxito en una competición de los mayores nivel y exigencia, como es un Mundial. Su enorme altura, propia de un jugador de baloncesto, ha intimidado tanto en defensa como en ataque. Los dos toledanos juegan de lateral derecho.
Maqueda ha sido uno de los «capos» no solo en la pista sino también fuera de ella, ya que es de los que con mayor expresividad dan rienda suelta a su alegría.