El concejal de Deportes de Toledo, Pablo García, ha participado este martes en la presentación de la séptima edición de ‘La Cigarra Toledana’, una carrera mítica en el calendario de pruebas deportivas de la ciudad que cuenta con el apoyo y colaboración del Ayuntamiento y que se celebrará el próximo 6 de noviembre con las inscripciones agotadas y el respaldo de 500 corredores.
En este acto de presentación han participado también el responsable del evento deportivo, José Ignacio Gómez; la directora adjunta del área de Deportes de la Diputación, Noelia Pérez; y el consejero institucional de Soliss Seguros, Celedonio Morales, entidad patrocinadora de la prueba incluida en el Circuito de Carreras del Grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España.
Este es el recorrido
Esta nueva edición se celebrará el domingo 6 de noviembre a las 10 horas con salida en el Cigarral del Ángel para dirigirse a la zona de La Bastida, La Oca, San Jerónimo, ronda del Valle, La Pozuela, Cigarral Viñedos de Santa María, Club Deportivo La Pozuela y Cigarral el Pintor para volver de vuelta por el mismo sitio al recinto del Ángel donde se encontrará situada la meta.
Esta prueba, promovida por la plataforma Cigarra Toledana junto al Cigarral del Ángel, se ha convertido en una cita obligada para los amantes del «running» y destaca por poner el valor el entorno de los Cigarrales y las vistas que desde estos espacios se tienen de la ciudad. Se trata de una carrera de montaña, con una dificultad moderada, cuyo recorrido mixto será en un 70 por ciento por tierra, sin grandes desniveles.
Ya hay fecha para la Cigarra Toledana, sepa cuándo es la carrera
Ya se ha llegado a su cupo máximo, 500 personas
Tal y como han explicado en esta presentación, las inscripciones ya han llegado a su cupo máximo, 500 personas. Asimismo, han avanzado que en esta séptima edición contarán con música en directo antes de la entrega de premios.
Además del apoyo del Ayuntamiento, ‘La Cigarra Toledana’ cuenta también como los de la Diputación, la Junta y numerosas firmas y empresas de la ciudad, además de la de un grupo de voluntarios sin los que la prueba no podría salir adelante y a los que la organización ha querido agradecer su «trabajo desinteresado».