El deportista toledano Pedro Tomé se siente «con muy buenas sensaciones» y con la intención de hacer podio en el próximo Ironman de Lanzarote (21 de mayo), una cita señera de la especialidad.
Se siente muy bien porque ha hecho algunos «cambios en los entrenamientos y la nutrición», lo cual le está beneficiando: «Me va muy bien, no me he lesionado, me veo más fuerte que otras veces y más fino», señala.
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Estos cambios tienen su explicación: «Damos unas pinceladas diferentes de un año a otro a ver si funciona, buscando mejoras. Con la nutrición se logra una buena base aeróbica», afirma.
Pedro Tomé: su quinto Ironman de Lanzarote
Con el de 2022 será su quinto Ironman de Lanzarote, puntuable para el Campeonato del Mundo; aunque hiciera podio, descarta participar en el Mundial hasta 2024, cuando cumplirá su ciclo de 10 años desde que acudiera al Mundial de 2014. Se clasificó para tres Mundiales, pero tuvo que desistir de acudir en dos ocasiones, ya que sin suficientes ayudas «resulta muy caro».
Pedro Tomé suele elegir una prueba de Ironman al año. La de Lanzarote «es importante por su carácter mítico», ya que «es una de las pruebas más duras junto al Mundial de Hawai, porque tiene volcanes, humedad, viento, calor…» El insular es un Ironman «full», esto es, incluye 3.800 metros a nado, 180 kilómetros de bicicleta y un maratón.
Busca siempre el podio
Desde que en 2014 ganara su primer Ironman, Pedro Tomé (que ahora compite en el rango de edad de 50-54 años) busca siempre el podio, como en la inminente edición del Ironman de Lanzarote.
Pedro Tomé, con uno de sus trofeos.
Tomé prefiere esperar a ir al Mundial cuando sea más seguro, cuando la situación sanitaria sea definitivamente buena.
¿Qué le queda este año de preparación y competición a Pedro Tomé? Tras un duatlón de distancia corta que completó en invierno para trabajar la velocidad, y hasta septiembre, hará un medio Ironman tipo «challenge» en el que entrenará «ritmos más vivos» (a finales de septiembre).
Entre medias, añade, quizá el Campeonato de Castilla-La Mancha de triatlón, de distancia olímpica (en agosto) y ya en octubre, un poco de descanso antes de que en noviembre empiece a preparar la temporada de 2023.
Dos menciones importantes
Pedro Tomé, que profesionalmente es entrenador, agradece la «comprensión» de sus clientes para compaginar su trabajo con la preparación y la competición. Y dedica una mención especial , «la más importante», a su pareja, Laura. Asegura que su apoyo es fundamental en su carrera deportiva, en todos los aspectos, incluida la alimentación.