El Quabit Guadalajara comienza este fin de semana una maratón de partidos que terminará el 12 de diciembre. Hasta entonces, los alcarreños jugarán con los rivales más fuertes de la categoría: Bidasoa, Naturhouse, Helvetia Anaitasuna, y León. El primer escollo en el calendario es Bidasoa, que ocupa el segundo puesto de la tabla clasificatoria.
Según la perspectiva de César Montes, Bidasoa ha llevado a cabo nuevas incorporaciones que se han adaptado muy bien a las exigencias de Jacobo Cuétara: “Están jugando muy bien tanto en ataque como en portería, con jugadores determinantes prácticamente en todos los puestos. Tras un comienzo espectacular, es uno de los favoritos para meterse en la copa Asobal”.
Quabit, estrategia
A pesar de lo temible del rival, Montes propone una estrategia parecida a la del resto de partidos: “Lo afrontamos como todos, nunca se sabe dónde se puede ganar o perder, debemos ir con confianza a todos los campos y sea quien sea que nos visite. Lo principal es recuperar sensaciones y competir tras un partido regular en Santander. Creo que estamos en una línea muy buena a pesar de la derrota ante Santander, la línea sigue siendo positiva”.
Sin embargo, Montes no se fía de Bidasoa, el equipo que la pasada temporada cortó la buena racha alcarreña y además se llevó los dos puntos del Santamaría.
[ze_summary text=»Pablo Paredes ha encajado bien en el equipo»]Pablo Paredes ha encajado bien en el equipo[/ze_summary]Montes, por su parte, habló de Pablo Paredes, su apuesta, que se está adaptando muy bien al equipo: ” Creo que ha encajado bien en el vestuario, algo fundamental para la gente que viene de fuera. Además, a nivel deportivo también ha encajado bien, después de haber jugado en Logroño de una manera parecida, algo importante. El año pasado no tuvo un rol tan importante como el de esta temporada, pero va cogiendo confianza y estoy seguro de que nos va a aportar mucho más, defendiendo en el centro, marcando, jugando de manera colectiva con la confianza que va adquiriendo”.
Por su parte, Pablo Paredes coincide con la mirada del entrenador: “Voy ganando confianza: me gusta que César piense que puedo dar más de sí, ganar en dureza y en ataque ganar en consistencia. Me estoy encontrando a gusto, en el vestuario va todo bien y he sido muy bien recibido, algo que ayuda a mantener la alegría”.