«Pude ganar el Mundial«. Esto dijo la tiradora almanseña Beatriz Laparra después de lograr dos nuevos hitos en su carrera deportiva, el segundo puesto en el Mundial y la conquista de la Copa del Mundo.
La reflexión de Beatriz Laparra
Se refiere a que quizá disputar alguna prueba no importante de más a lo largo de una temporada demasiado exigente le hizo llegar algo cansada psicológicamente al tramo decisivo de la misma. Piensa corregirse en el próximo ejercicio.
A pesar de todo ello, hace un «balance muy positivo» de la temporada, a la que califica de «increíble», y es que admite que resulta muy difícil mantener la regularidad dado el nivel alto y cada más exigente de sus competidoras. «Ojalá la temporada que viene salga todo la mitad que bien que en esta», añadió.
De cara a la nueva temporada, va a empezar a entrenar pronto, en octubre, como la pasada campaña, cuando todo fue tan bien, aunque con la vista puesta en sacrificar alguna competición salvable de aquí a cuando empiece «lo gordo», en febrero (Copa de España, Gran Prix.
[ze_summary text=»Beatriz Laparra, de 37 años, empezó a practicar el tiro a los ocho, y a competir a los 11″]Beatriz Laparra, de 37 años, empezó a practicar el tiro a los ocho, y a competir a los 11[/ze_summary]Beatriz Laparra, de 37 años, empezó a practicar el tiro a los ocho, y a competir a los 11. La vena le viene de familia. Su padre regenta una armería en Almansa, el mismo que le empezó a enseñar «todo lo que sabía». El resto del aprendizaje llegó tras sus experiencias en la Selección y al competir con grandes tiradoras. Actualmente sigue trabajando en la armería familiar. Siempre se ha sentido muy arropada por la familia. Y en su carrera admite que la dedicación y la abnegación de su padre, que la acompañaba a todas partes, fue fundamental.
Hija Predilecta de Almansa desde 2015, obtuvo en 2018 una beca de 4.000 euros de la Junta de Castilla-La Mancha, la misma que recibirá este año. Entre esta cantidad y algunas aportaciones del Ayuntamiento almanseño, su club (la Sociedad de Tiro Olímpico y Pichón de Almansa) y los patrocinadores, obtiene «casi» lo suficiente para competir.