Ocho ajedrecistas ciegos y con discapacidad visual competirán contra videntes en el V Open Internacional de Ajedrez de Albacete, que se disputa del 28 de abril al 2 de mayo en el Palacio de Congresos de la localidad.
Entre los participantes se encuentra el balear Alejandro Martínez, uno de los jóvenes jugadores españoles que mayor proyección de futuro tiene. Junto a él, también jugarán el canario José Manuel García; los andaluces Antonio Quintero y José Manuel Vela; los madrileños Antonio García y Eduardo Méndez; y los catalanes Javier Muñoz y Manuel Pimienta.
El Open se disputará por sistema suizo a ocho rondas. El ritmo de juego será de 90 minutos de tiempo final más un incremento de 30 segundos por jugada.
Los participantes con discapacidad visual se medirán en abierto, en igualdad de condiciones al resto de competidores sin discapacidad de países de todo el mundo. En total se estima que se inscriban más de 100 jugadores.
El ajedrez es un deporte de larga tradición entre las personas con discapacidad visual por su facilidad para ser practicado de forma integrada en las competiciones con personas videntes.
Para la práctica del ajedrez, los ciegos necesitan solo algunas adaptaciones en el material de juego. Por ejemplo, el tablero tiene los cuadros negros ligeramente más altos que los blancos para hacerlos diferentes al tacto. Además, las piezas negras llevan, en su parte superior, una protuberancia que las distingue de las blancas.
Cada casilla del tablero tiene un orificio en el centro, en el que se insertan las piezas a través de un pequeño vástago que éstas tienen en su parte inferior. Mediante este sistema, las manos del jugador pueden tocar todas las piezas sin derribarlas.
Las partidas entre ajedrecistas ciegos se juegan en dos tableros. Cada uno de los jugadores mueve las piezas en su tablero de modo que, al tocarlas, no moleste ni sea molestado por su contrario. Los relojes de ajedrez disponen de un mecanismo de voz con auriculares para acceder al tiempo de juego.