El club de atletismo más antiguo de Castilla-La Mancha es un grupo de amigos a los que solo les interesa el deporte, la salud y el futuro de sus miembros. Ni más ni menos.
Oficialmente el CCM-CAT (Club de Atletismo Toledo), un ejemplo de amor al deporte, nació en 1979. Este año cumple, pues, 35. Lo llevan los mismos hombres del principio, comandados por tercer «mandato» consecutivo por Julián Martín. «Mandato» entre comillas porque Martín es el primer «currante», el que lidia con las instituciones y los patrocinadores, porque le conoce todo el mundo.
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Deportivamente hablando, el CAT llegó a tener en los mejores años a 500 atletas. Explica Martín que eso era porque la oferta deportiva de entonces no era tan generosa como la actual. Hoy en día el club arropa (nunca mejor dicho) a más de 200 corredores, desde los 6 a los 70 años, o sea, encuadrados en todas las categorías posibles.
El atleta más pequeño tiene algo más de cinco años, y el más longevo, 70. Este último es Juan López, y su estado de forma es tal que acaba de ganar la Media Maratón de Santa Pola (Alicante) tras lograr una marca de 1:34. «Muchos corredores no veteranos querrían ese registro», comenta el presidente del CAT en señal de admiración.
Julián Martín insiste en la labor social del club: «Estando aquí les quitamos de otras cosas, ya sabes, somos un club social, familiar y deportivo», afirma, pero ello no quita para que por sus filas hayan pasado nombres ilustres como los de Juan Carlos de la Ossa, Chema Martínez, Julio Rey, Fernando Rey, Iván Galán, Roberto Parra, Marta Silvestre, Eugenia András, Lucas Búa, Ángel Ronco, Manolo Sánchez Carbonell, Miguel Ángel Erades. Vanessa Veiga, Jesús Antonio Núñez, Javier Bermejo, Fernando Fernández Gaitán, Óscar Martín, Ricardo de Pedraza, Sonia Labrado, Mayte Mora… La lista, como se lee, es respetable.
Y han logrado varios campeonatos de España a nivel individual y colectivo. Martín incide orgullosamente en el caso de las que llama «Las 13 Rosas», ese extraordinario grupo de chicas que han sobresalido siempre, en todas las categorías por las que han pasado, hasta proclamarse campeonas de España en una ocasión.
El presidente del CAT reconoce el patrocinio de Caja Castilla-La Mancha (CCM), «responsable en un 80 por 100 de que exista el club desde hace 23 años», sostiene quien subraya la colaboración asimismo desde hace tantos años de la Diputación de Toledo y la Junta de Castilla-La Mancha. No se olvida del Ayuntamiento de Toledo, que les cede sus instalaciones.
Del abolengo de este club atlético da fe la importancia de los torneos que organiza: el Cross y la Marcha España Toledana. Si el cross es el 16º mejor de España entre un total de 400 pruebas «con un presupuesto 10 veces menor al de muchos», asegura, la marcha es la tercera a nivel nacional, con la misma particularidad.
«Todo el dinero que obtenemos va para los atletas y las pruebas. Aquí nadie cobra», asevera Julián Martín, un enamorado del atletismo, como todos los componentes del CAT, que sí, es una «gran familia». Y muy bien avenida.