Parece que les hubiera tocado una varita mágica al nacer o que un hada les susurrase al oído el hechizo del éxito. Pero no, no es así. Detrás de los karatekas olímpicos españoles hay una historia de esfuerzo, superación, constancia, disciplina, organización, innovación y, por supuesto, talento; muchísimo talento individual y colectivo.
Fotos: el homenaje del COE a los karatecas olímpicos españoles
El karate español en katas manda en el tatami mundial, sobre el que compiten deportistas que son los mejores y más laureados de la historia de esta disciplina. La bandera de España se eleva sin parar en las competiciones internacionales continentales o universales… Nadie dudaba que el karate español y sus grandes protagonistas tendrían reservado un lugar en la historia en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 y en el casillero de las medallas.
El oro de Sandra Sánchez y el «oro» de Damián Quintero
Pero había que convertir los pronósticos en realidad y hacerlo en la cuna del karate, Japón, sede de las Olimpiadas; y además lograr el ansiado oro arrebatándoselo a japoneses ante las narices de jueces poco dados a desairar a los nipones.
Sandra Sánchez lo logró. La única vez que el karate ha sido deporte olímpico ella se coronó reina absoluta del Olimpo sobre el tatami del legendario Nippon Budokan y ante ante la japonesa Kiyou Shimizu, una grande condenada a segunda por la talaverana, que la gana una y otra vez.
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Después tenía que competir Damián Quintero, campeón del mundo, era el favorito al oro… Pero… No pudo ser. Los jueces le dieron plata, aunque en la cabeza de toda España y de todo el deporte el oro se lo mereció el deportista malagueño de Torremolinos.
Llevado por las emociones de la mañana y por las ganas de hacer justicia, al menos en casa, el presidente del COE, Alejandro Blanco, así lo soltó. Dos oros para dos españoles ante dos japoneses, en karate y en Japón, era demasiado.
Jesús del Moral, el mejor entrenador del mundo
Siempre detrás a los ojos de los focos, pero delante para quienes conocen cómo se ganan tantos títulos consecutivos, está Jesús del Moral. El maestro del karate, el entrenador, el seleccionador nacional más laureado de la historia, el mejor del mundo y el mago de los katas que ha llevado a este deporte a conquistar todas las cimas que podían imaginar. Oro para Sandra, plata para Damián y campeones del mundo por equipos.
El destino juntó a estos tres nombres en el tiempo y el espacio y su talento y esfuerzo ha hecho todo lo demás.
Antonio Moreno, el ojo que fichó al mejor
No podía faltar en el homenaje del COE otra de las cuatro patas básicas de la mesa. Otro castellanomanchego, Antonio Moreno Marqueño (La Roda), el presidente más longevo al frente de la Real Federación Española de Karate, vicepresidente del COE, la cabeza que ha puesto dirección a esta época dorada y el ojo que fichó a Jesús del Moral.
Emocionados y agradecidos, todos ellos intervinieron para acordarse de todas las personas que les han acompañado hacia el Olimpo, especialmente sus familias, pero también personal técnico y administrativo, fisioterapeutas, patrocinadores y, por supuesto, los primeros maestros. Allí estaba el talaverano Javier Pineño, primer maestro y peldaño inicial en el ascenso imparable de Sandra Sánchez. Tampoco se perdieron la cita en el COE el director general de Juventud y Deportes de Castilla-La Mancha, Carlos Alberto Yuste; la alcaldesa de Talavera; Tita García Élez; el concejal de Deportes de la Ciudad de la Cerámica, Sergio Gutiérrez; y el concejal de Deportes de Torrijos, Félix Bandera.
La conjura del éxito en el karate
En ningún caso ha sido un camino de rosas, ni física ni psicológica ni emocionalmente. Las medallas seguramente compensan. Y el hueco que se han hecho en la historia del karate, del deporte en general y del olimpismo les convierte a todos ellos inolvidables y seguramente irrepetibles.
Sandar Sánchez, Damián Quintero, Jesús del Moral y Antonio Moreno, la conjura del éxito en el karate. Así se lo ha reconocido hoy el COE.