Ahí las tienen, las integrantes del Mora femenino de fútbol sala lo han ganado absolutamente todo.
21 de 21. No han perdido, ni siquiera empatado, ninguno de los partidos que han disputado. El Mora femenino de fútbol sala es el único equipo de España, al menos en categoría femenina, que puede presumir de tener este espectacular bagaje deportivo. 63 puntos en el casillero, 113 goles a favor y 22 en contra. Aventajan en 14 puntos al segundo clasificado, el Urda; y en nada menos que ¡¡¡60 puntos!!! al farolillo rojo, el Navarrosa CFS Azuqueca, que sólo ha ganado un partido.
Juegan en Primera Autonómica de Castilla-La Mancha y les entrena un auténtico crack de este deporte: Raúl Martínez, ocho veces campeón de España con la selección de Madrid y técnico que ha pasado por equipos de renombre como Lobelle Santiago o Futsi Navalcarnero. Y que ahora, como refleja en su cuenta de Twitter, «entreno por hobby en el Mora FSF».
La plantilla la componen Virginia Pérez (portera), Cristi Martín de Blas, María Cuervo, Clarita Jiménez, Sandra Hernández, Maite Sanz «Cuer», Sheila Rodríguez, Tere Martín de Blas, Laura García, María Carrobles, María Bravo «Baturra», Elena Dávila, Clara del Pino, Lourdes Jiménez y Alejandra Serrano (portera). El entrenador de las porteras es Carlos Santamaría «Santa»; y el delegado, Gregorio García Movido «Goro».
Entre los rivales más difíciles, el propio Urda, Villacañas (donde las morachas fueron prácticamente «en cuadro» por tener medio equipo de baja), y Menasalbas, donde consiguieron un 2-3 tras un encuentro muy disputado. Lo demás, poco menos que coser y cantar. Con respeto a las rivales, eso sí.
Todas sus jugadoras o estudian o trabajan, pero todos los martes y los viernes, sin faltar, se juntan en Mora para entrenar y disfrutar de su gran pasión: el fútbol sala.
Un conjunto que cuenta como segundo entrenador con Quique Sedano, Kikillo, otro internacional con la selección absoluta que ahora juega en Valdepeñas. Y entre las jugadoras, dos que ya han alcanzado la selección: Clara y «Cuer» (como conocen a Maite).