El Quabit BM Guadalajara visita la cancha del BM Villa de Aranda con el objetivo de afianzar su posición en la mitad de la tabla, eludiendo la liga de los equipos que lucharán por conservar la categoría en la segunda vuelta. «Tienen una intensidad muy grande en ataque, van realmente muy duramente en las acciones de choque, de lanzamiento, de penetración, con muchísima intensidad y en defensa se cierran muy bien», ha dicho sobre su próximo rival el entrenador del Quabit, Mateo Garralda. Y ha agregado: «Si no tienes una continuidad en el juego, al final lo que haces es chocarte contra un muro».
El técnico de Burlada confía en que su equipo salte a la cancha con la misma intensidad que está mostrando en todos los partidos y logre jugar «con la misma tranquilidad y seguridad con la que en muchos momentos está jugando en casa».
Y ha apostillado: «Si conseguimos eso tendremos más oportunidades de ganar, mientras que si salimos tensos, nerviosos y agarrotados, como las dos últimas salidas, tendremos un partido muy complicado».
Respecto al recibimiento que el Quabit se encontrará en el «Príncipe de Asturias», Garralda ha declarado que la clave estará en «la experiencia que cada jugador tenga sobre esos ambientes».
El lateral izquierdo del Quabit, José María Bozalongo, ex jugador del Villa de Aranda, ha asegurado afrontar este partido con ilusión y ha indicado que es una pista muy difícil.
«Yo ya lo he vivido y nos lo van a poner muy duro, la afición anima a muerte a su equipo y es un campo muy cerrado», ha afirmado el jugador riojano.
«Creo que nosotros somos mejor equipo y, si hacemos las cosas bien, podemos ganar y traernos los puntos», ha indicado Bozalongo, quien cree que el Quabit tiene jugadores con más experiencia y eso tiene que valerle al final.
Todos los jugadores de la plantilla alcarreña están a disposición de su entrenador para disputar este choque, aunque el extremo Coque Fontenla viaja con cierta sobrecarga muscular y el central De la Rubia arrastra molestias en un abductor.