El Toledo recibe mañana miércoles (20:45 horas) al Huesca en partido de la primera eliminatoria de la Copa del Rey que, a partido único, supone la ocasión de resarcirse del empate del domingo ante los propios oscenses (1-1) en el ‘Salto del Caballo’ cuando hizo méritos sobrados para quedarse los tres puntos.
Con un concepto claro del juego del cuadro de Pablo Alfaro, que previsiblemente volverá a repetir, es decir, aguantar, defender a tope e intentar aprovechar una acción aislada para marcar, los de Imanol Idiakez afrontan el choque un tanto dolidos tras el 1-1 liguero al exponer más que su rival y obtener sólo un punto, aunque en todo caso contentos porque lo salvaron en el tiempo de añadido.
Ante un planteamiento tan defensivo, frente a un equipo experto y que se postula como aspirante a retornar a Segunda, la propuesta de Idiakez será mantener el criterio ofensivo, a partir de la solvencia que ofrecen en el medio campo Albistegi y Barranco, con Sorribas de eje, pero desde un mayor rigor defensivo, evitando la dificultad que tiene para controlar las acciones a balón parado.
En su ánimo por pasar de ronda, los verdes también deberán tener mayor acierto atacante y, para ello, será preciso contar con un mayor arsenal, pues en el encuentro liguero el único atacante nato, Rufino, no entró hasta el minuto 72, cuando el Huesca había anotado su gol en un despiste defensivo local.
Todo indica, por tanto, que Idiakez podría dar oportunidades a los menos habituales, incluido Iván Mateo, también suplente el domingo, o el propio canterano Rubén, autor del gol del empate, o Héctor, que aún no se ha estrenado en competición oficial.