El Trillo ha completado una gran campaña en el Grupo VI de la Segunda División Autonómica, en la que se ha proclamado brillante subcampeón. El equipo le mantuvo el pulso al Yebra hasta el último partido, en el que los jugadores guadalajareños noquearon al Albalate por 5-0 en la primera parte. En el descanso supieron que el Yebra, que jugaba al mismo tiempo, le había hecho ya cuatro goles al Dínamo Guadalajara B por lo que se desvanecieron de un plumazo las últimas esperanzas de ser campeones. El resultado final del partido, 5-3, es un buen indicador de la decepción.
Sin embargo, tras unos días, el balance de la temporada se puede considerar muy positivo. El equipo ha concluido la temporada con 68 puntos, solo dos menos que el líder. El Robledal ha sido un bastión inexpugnable para el resto de los equipos de la categoría. Tan solo el Espinosa fue capaz de sacar un empate a un gol de las orillas del Tajo. Los demás partidos se cuentan por victorias.
Fuera de casa, los azulones también han hecho un gran papel, con un balance de siete victorias, algunas de ellas muy deseadas como la épica frente al Espinosa por 0-5, tomando cumplida revancha del partido de ida, o contra el Cifontino, al que vencieron en el tramo final de la liga por 0-1. El Trillo se ha impuesto en los dos derbis locales con una claridad quizá mayor de la que expresan los resultados (2-0 en casa en el primer partido).
Tan solo ha habido una derrota clara del Trillo en toda la temporada, frente al CDE Quer, con el que perdieron por 6-0 (Jornada 22), que añadida a un empate contra el Fontanar (Jornada 26) y a la derrota frente al Yebra en el minuto 92 (Jornada 18), han impedido la que hubiera sido una victoria histórica del Trillo al final de la Liga. “Estoy muy orgulloso de la actuación de mis chavales. Han hecho el juego que teníamos que hacer, y hemos tenido hasta el último minuto fe en nuestras posibilidades de ser campeones”, explica el entrenador, Antonio Sancho.
La temporada comenzó basada en una defensa férrea, que el equipo ha mantenido hasta el final. Solo ha encajado 35 goles en 30 partidos, concluyendo como segundo equipo menos goleado, solo por detrás del Usanos. Sin embargo, a medida que avanzaba la temporada, el juego del equipo ha ido ganando octanos hasta alcanzar un nivel excelente también en ataque. Sigüenza B, Albalate, Dínamo C y Espinosa han sufrido los mejores minutos de los trillanos en partidos en los que “ha sido un verdadero lujo estar en la banda dirigiendo un vendaval ofensivo”.
Sancho habla maravillas de sus jugadores. «Tengo el mejor portero y el mejor nueve de la categoría. Mis centrales, Jorge Peña y Dani Alvarez, son dos jabatos. Peña, además, nos ha ayudado mucho con su gran remate de cabeza a desbloquear resultados inciertos. Los dos laterales tienen fuerza y proyección ofensiva. David Bau compensa todas las líneas del equipo y Hugo Pérez pone la genialidad sobre el terreno de juego. Tenemos un bloque magnífico, tanto humana como deportivamente”. Así define el míster la columna vertebral de su equipo, «sin desmerecer a nadie, porque todos son imprescindibles y han sido necesarios para lograr el subcampeonato: la bravura de los hermanos Casas y de los Batanero, la casta y el trabajo de Paco Henche, el empuje de Vasile o el saber estar en la banda de Raúl, que me ha suplido en la banda cuando no he podido estar”. El alcalde de Trillo, Francisco Moreno, felicitó al equipo al terminar la liga: “Le estamos muy agradecidos a nuestros chavales. Sienten los colores y han paseado el nombre del pueblo por toda la provincia haciendo gala de una deportividad y de un pundonor encomiables”.
El CD Trillo se plantea la temporada que viene con mucha ilusión. El equipo volverá a competir en Segunda Autonómica, y Sancho introducirá nuevos mimbres, ahora en edad juvenil, que le pueden aportar al equipo un plus de competitividad. «El objetivo será sin duda rematar la faena de este año, quedando campeones», termina el míster.