El BM Villa de Aranda Top Ribera, de Aranda de Duero (Burgos), recibe mañana, a partir de las 19 horas en el pabellón Príncipe de Asturias, al GlobalCaja Ciudad Encantada de Cuenca con el objetivo de abrir distancias con los puestos de descenso.
Tras cumplir los pronósticos y caer derrotado en el Palau Blaugrana, el equipo dirigido por Jacobo Cuétara regresa a la competición enfrentándose a un rival que poco a poco ha ido complicándose la vida y en estos momentos se antoja rival directo por la permanencia.
Ya en la primera vuelta, el Villa de Aranda arrancó un empate en El Sargal y hace apenas un mes venció con comodidad al conjunto conquense en el amistoso disputado en el Príncipe de Asturias.
Esa victoria, sumada a la mejoría ofrecida tras el parón navideño, permite al equipo burgalés afrontar el duelo con buenas sensaciones, aunque el propio Cuétara ha hecho hincapié en la dificultad de la cita.
Según ha afirmado el técnico asturiano, Cuenca es un equipo «con una gran calidad individual» en el que Zupo Equisoain «ha impuesto la intensidad y competitividad que siempre imprime a sus equipos».
«En la primera vuelta tuvo bajas importantes y ahora mismo está afrontando una fase del calendario muy difícil, pero no creo que al final de la temporada esté luchando por evitar el descenso. No es ese su lugar», ha añadido Cuétara.
Con todo, el Villa de Aranda intentará ofrecer su mejor versión y controlar el partido para llegar a los minutos finales con opciones de superar al conjunto conquense.
«Ha llegado un momento en el que afrontamos los partidos sin pasado, sino mirando al futuro. Tenemos que ir partido a partido intentando sumar frente a cualquiera de los rivales que tengamos», ha asegurado Cuétara.
En este sentido, conseguir una victoria frente a Cuenca ayudaría a cuadrar las cuentas del Villa de Aranda, inmerso en la parte más dura de la competición y pendiente de visitar plazas tan complicadas como León o Logroño.
A la espera del desarrollo del último entrenamiento de la semana, Cuétara podrá contar con todos sus jugadores para la disputa del encuentro, a excepción de Diego Camino, que será duda hasta última hora.
El capitán del equipo sufre unas molestias en el tendón rotuliano que le impidieron entrenar el jueves y el cuerpo técnico decidirá en función de la evolución de la dolencia.
Por su parte, la directiva ha decidido declarar el partido como Día del Club aprovechando la rivalidad existente entre ambos equipos desde hace años.