A tenor de la historia reciente del CD Toledo, equipo suscrito a inicios ligueros paupérrimos, el triunfo en Manzanares tiene un valor ciclópeo. Aquello de no haber sumado de tres… hubiese instaurado la enésima crisis por la Ciudad Imperial tras el empate del pasado domingo ante el filial albaceteño. Bajo esa mochila de responsabilidad, el cuadro toledano vio puerta en las dos partes, a través de Stevens y Piochi, y, pese a que le costó matar el partido, mantuvo a un Manzanares negado a la rendición.
Retaguardia bajo mínimos
Segunda jornada y retaguardia a cuadros, bajo mínimos. No quieres té, toma dos tazas o, mejor dicho, tazones. De los cuatro centrales verdiblancos en nómina, solo uno en combate para la visita a Manzanares: Kupen (que a la postre se retiró lesionado). Los demás… sancionados (Iván y Sergio González) y Chinchu, en hospital de campaña tras sufrir un fuerte esguince el domingo pasado. Ante tal excentricidad, Alfredo Santaelena tuvo que hacer encaje de bolillos. Colocó a Luna en el centro de la defensa, mientras que Angelito, el hombre polivalente, figuró en el lateral zurdo. Una zaga custodiada por Dani Simón bajo palos en detrimento de Yelco, que vio la roja en el primer envite.
El Manzanares CF, aterrizado en 3ª RFEF -recientemente- mediante la senda de los play-off, no es el chico nuevo en la oficina que llega cohibido, timorato. Todo lo contrario. No se amilana. En su libro de estilo compagina electricidad junto a tibia fuerte, férreo en los duelos. Y por su lar habitual, el José Camacho, suele traer de cabeza a sus contrincantes. Saca la coraza y a jugar.
A marcar territorio y dominar
A marcar territorio y dominar. Esa fue la consigna fijada que el Toledo traspasó a la práctica desde el primer latido del partido. Muchas veces queda todo en papel mojado; esta vez no fue así. Mediante Gavilán, con las garras bien afiladas, el conjunto foráneo empezó a carburar en el último cuarto de campo. Y, el hilo conductor, Pepe Delgado también había logrado pulsar el piloto rojo. Cuando entra en acción, pararle suele virar hacia lo quimérico.
Pese a la superioridad verde (en Manzanares de rojo en el estreno de su tercera vestimenta), Clifford Hanson, que recaló ayer mismo en la entidad manzanareña, puso sus cartas encima de la mesa. Poco o nada le importaba recibir balones a cuentagotas, porque no dudaba en hacer la guerra por su cuenta, ‘motu proprio’. En su primera incursión, y sin pensárselo dos veces, buscó la portería de Dani Simón. Eso sí, el chut acabó desdibujado, lejos de los tres palos. Buena la intención, pero no tanto la ejecución.
Stevens, latigazo y golazo
Superado el ecuador del primer periodo, que coleccionó disparos variopintos por lado del Club Deportivo Toledo, Stevens provocó un ¡oh! en la afición capitalina desplazada hasta la localidad ciudadrealeña. Le cayó un balón en la frontal, se posicionó y firmó un disparo ortodoxo que murió besando las redes. Un tanto musical que hacía justicia a lo ojeado sobre el cuadrilátero.
Y como el fútbol no es más que un estado de ánimo, a renglón seguido, el propio Stevens se apuntó un obús con el pie derecho a veinte metros de la jaula local. Terminó fuera, aunque se ratificaba una cosa: el lateral, ex del Guadalajara, estaba desmelenado. Máxime estando por delante en el marcador, que servía para evitar taquicardias prematuras. Hasta el tiempo de asueto, apenas se vislumbraron oportunidades claras y manifiestas. Si bien es cierto que el Manzanares ganó enteros a la hora de pisar más la zona contrincante.
Mover el árbol
A Reyes Albandea, técnico azulón, le dio por mover el árbol. Así las cosas, a la vuelta de vestuarios, efectuó un doble cambio. Uno de ellos, con trazas de ataque. El Toledo, sabedor de que tenía que matar el partido en cuanto pudiese para que no volviera a acaecer lo mismo de hace siete días, tuvo un pequeño susto por partida doble. Sonó la alarma: primero, Ismael Sagra, libre de marcas y con una pradera por delante, optó por disparar al palo largo; luego, Clifford Hanson hizo que Dani Simón se tuviera que emplear a fondo para negar el tanto del desempate.
Santaelena, que a la hora de encuentro ya había activado la palanca de los cambios (Óscar, Álvaro y Kofi), fue testigo directo de una nueva indisposición en defensa. Ver para creer. Kupen, el único central superviviente a las lesiones, se marchó dolorido a la caseta, dejando así una zaga huérfana de centrales. Da para un programa de Cuarto Milenio…
Kofi agita el asunto y Piochi ve puerta
Después de ese sinsabor, Kofi rozó con las yemas de los dedos el gol. En menos de cinco minutos se guardó en el bolsillo dos latigazos venenosos. Sin duda, el gran animador del carrusel de ingresos al verde. Aún así, al CD Toledo le faltaba meter tierra de por medio. El 0-2, una diferencia, a priori, definitoria, se le atragantaba en demasía. Y, claro está, los fantasmas del pasado iban a empezar a sobrevolar. Sin embargo, el 0-1 mutó en las postrimerías y el elenco verde pudo agrandar su renta mediante Piochi. Ahora, en Toledo, con los tres puntos, las aguas retornan a su cauce habitual.
Ficha del partido
Manzanares CF: Fran Ucendo, Raúl Calero, Chema García, Juan Mora (Alhagie, minuto 45, Carlos García, Pablo Carballo (Rubén, minuto 68), Javi García, Juanjo Luque (Lomas, minuto 45), Hanson, Ismael y Aner.
CD Toledo: Yelco Ramos, Stevens, Kupen (Iker García, minuto 66), Luna, Angelito, Rodri, Reguera, Tamayo (Álvaro, minuto 60), Pepe (Kofi, minuto 60), Chupi (Piochi, minuto 85) y Gavilán (Óscar, minuto 60).
Tarjetas: Javi García (amarilla, 50’), Pepe Delgado (amarilla, 58’), Angelito (amarilla, 58’), Luna (amarilla, 78’) y Raúl (amarilla, 86’).
Goles: 0-1, Stevens (minuto 24). 0-2, Piochi (minuto 90)
Mario Peñalver