El Talavera se ha ganado ya el derecho a que la lucha por el ascenso deje de ser una quimera, un bonito sueño. Los de Fran Alcoy ya van en serio. El mejor adjetivo que se le puede aplicar a un equipo ya es atribuible al conjunto blanquiazul: fiable.
El Prado, el fortín del Talavera
El fortín del Prado ejerció de tal: volvió a ganar. Desde que el «Efesé», el Cartagena, lo asaltase en Copa en un partido épico, el templo talaverano es una fortaleza inexpugnable.
Y eso que los cachorros deportivistas se adaptaron mejor a las inclemencias del campo. Borja Galán avisaba tras un rechazo, a lo que respondió el Talavera con dos disparos prometedores de Víctor Andrés y Villajero.
Pero en el primer tiempo, que acabó en 0-0, dio la impresión de que el Deportivo había hecho más méritos, impresión que cambió tras el descanso. El cuadro local se fue a por el partido. Una acrobacia de Jorge Fernández llevó veneno.
[ze_summary text=»El Deportivo Fabril llevaba peligro tras el descanso en los contratraataques»]El Deportivo Fabril llevaba peligro tras el descanso en los contratraataques[/ze_summary]Por su parte, el Fabril no renunciaba a llevar peligro por medio de las contras, como la que rubricó Caballo. Pero este año no hay quien rasque bola en el Prado. Quique derribaba a Laerte. Penalti que transformaba, con seguridad, Jorge Fernández.
Ya tres minutos del final, Espinar servía a Chistian para que este lograse el 2-0 definitivo entre el entusiasmo de la parroquia blanquiazul, que ya empieza a dar crédito a lo que jornada a jornada deja de ser un milagro de los de Fran Alcoy.
CF Talavera: Sergio Arenas, Óscar Prats, Villarejo, San José, Gonzalo, Hakim, Melchor, Víctor Andrés, Christian (cabañas, minuto 90), Laerte (Espinar, minuto 71) y Jorge Fernández (Rubén Rivera, minuto 76).
Deportivo Fabril: Francis, Blas, Quique Fornos (Gaizka Martínez), Raúl González, Lucas, Expósito, Caballo (Jardel), Queijeiro, Luis Fernández, Romay (Martín Bengoa) y Borja Galán.