El Formac Villarrubia tuvo que afrontar en los primeros minutos del partido el tremendo empuje de los gallegos de Bergantiños, que se lo creían, que se empleaban a veces con demasiado ímpetu. Tanto empezó a ir el cántaro a la fuente que, después de un gran disparo al larguero de la meta visitante, Jorge Sanz, de zurda y cazando estupendamente un rechazo, empalmaba a la red sin que el cancerbero ciudadrealeño pudiese hacer nada. Le sorprendió el chut y mucho.
Éxito del Formac Villarrubia
No empezaba bien la cosa para el Formac Villarrubia, que sin embargo reaccionó de la mejor manera: en seguida y goleando. Fue Copete el que finalizó, en una acción perfecta de «killer» ideal, con la puntera un gran servicio, remachando una virtuosa jugada vertical del conjunto visitante.
En defensa de los gallegos hay que decir que no desistieron. Ni mucho menos. Así, aunque fuera en una jugada tonta donde las hubiera, volvieron a ponerse por delante en el marcador, cuando el centro a pie cambiado de Cañi, a la olla, que de cara a la red parecía inofensivo, acabó en la misma por el despiste general de todo jugador que se puso en su camino. Lamentable.
[ze_summary text=» El Bergantiños aún estaba a dos goles de la gesta»]El Bergantiños aún estaba a dos goles de la gesta[/ze_summary]
Pero de ahí al final, juego bronco y poco fútbol reseñable antes del descanso. El Bergantiños aún estaba a dos goles de la gesta.
A poco de empezar el segundo tiempo, una contra del Formac Villarrubia no acabó en gol -que lo hubiera sentenciado todo- de milagro.
Pero el Bergantiños achuchaba, y de qué manera. Llegaron dos ocasiones de peligro. El Formac Villarrubia resistía.
Aunque eso fue el canto del cisne para el Bergantiños, ya que de ahí al final, el Formac Villarrubia aguantó sin muchos problemas. Los coruñeses tuvieron todos los problemas del mundo para enlazar jugadas. Lo confiaron todo a los pases laterales, a los zambombazos al área, facilitando la tarea a la sobria defensa ciudadrrealeña.
Tanta era la desesperanza gallega, que Agulló hizo una fea entrada al portero visitante que le costó la roja directa. Pero ya quedaba poco. Casi toda la segunda parte el juego fue bronco y estuvo parado, lo que beneficiaba al Formac Villarrubia. Por lo locales, una postrera buena ocasión final fue el único botín ofensivo, inútil. Al final, 2-1. 3-2 en total para el Formac Villarrubia.
Los tres equipos de Castilla-La Mancha estarán en el bombo mañana lunes.