El nuevo entrenador del Albacete Balompié, Lucas Alcaraz, ha afirmado en su presentación que está convencido de que su equipo «va a lograr el objetivo» y que tratará de aportar su «granito de arena para que la plantilla vuelva a ilusionarse y a su vez la afición».
Alcaraz ha prometido «trabajo e implicación» para reconducir la situación de un equipo que lleva nueve jornadas sin ganar y que, tras perder en Oviedo, entró en puestos de descenso, circunstancia que acabó con la destitución de su antecesor en el cargo, Luis Miguel Ramis.
El preparador granadino ha asegurado que la plantilla blanca tiene «argumentos más que suficientes para conseguir el objetivo» y ha recalcado que aprovechará «lo bueno que ya había hecho el equipo hasta ahora para incluir, progresivamente, mejoras».
De hecho, ha ensalzado a Ramis por «haber hecho historia en el Albacete el año pasado» y ha reiterado que con «la implicación de la plantilla se podrá conseguir el objetivo».
El nuevo técnico del Albacete ha reconocido que al equipo le falta gol -es el menor goleador de la categoría-, pero ha explicado que confía en «lograr un equilibrio tanto a nivel defensivo como ofensivo, para tratar de ser lo más eficiente posible».
Y preguntado por si revolucionará el once inicial, ha contestado que es partidario de hacer modificaciones «de manera natural», con el fin de que «se vayan adaptando los jugadores y progresivamente ir aportando mejoras en el juego».