Hoy miércoles 22 de mayo se cumplen 30 años de aquella fecha en que el CD Toledo se quedó a un paso del cielo del ascenso a la Primera División, como recuerda Valentín de la Fuente (@toledoverde). El Toledo ganaba por 1-0 al Real Valladolid en el primer partido de la eliminatoria, disputado en el Salto del Caballo.
En 1991 militaba en Tercera División y en la temporada 1993-94 estaba a un paso de Primera División.
En aquel partido Paniagua lograba el único tanto del encuentro después de que Pardina peinara de cabeza tras el lanzamiento de una falta.
Siete días después, en el estadio José Zorrilla llegaba el muy polémico arbitraje de Brito Arceo, el ascenso de los de Pucela y el enfado monumental, histórico y definitivo de la parroquia toledana, que contó en el feudo castellanoleonés con una nutridísima representación (más de 7.000 toledanos). El Toledo reclamó hasta tres penaltis en el área local. El cuadro vallisoletano acabaría ganando por 3-0.
El Valladolid jugaba la eliminatoria para evitar el descenso directo a Segunda División.
La afición del Toledo recibiría al equipo en masa, de madrugada. Aquella derrota quedaría grabada a dolorosos sangre y fuego en la memoria de la afición verdiblanca. Para los restos.