El alcalde de Guadalajara, Antonio Román, ha animado al CD Guadalajara a «agotar» todos los recursos en defensa de lo que sus rectores consideran que «han hecho bien» para evitar el descenso administrativo a Segunda división B.
Después de conocer el expediente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que sanciona al club con 90.000 euros de multa y el descenso de categoría, Román ha reconocido que no es optimista, pero que «existen vías de recurso para la defensa del club y mientras haya algo de luz hay que mantener la esperanza».
En declaraciones a la Agencia Efe, Román ha confirmado haber mantenido conversaciones «a diferentes niveles» para apoyar la permanencia del Guadalajara en Segunda división, pero «será la Liga, el Consejo Superior de Deportes o la justicia ordinaria» quién decida y el club el que tenga que defenderse de las acusaciones.
Para el alcalde, existen otras vías de sanción diferentes a la pérdida de la categoría que «es lo máximo para el aficionado al fútbol, los abonados o los jugadores de las categorías inferiores».
Román ha descartado que el consistorio entre en el accionariado del club para ayudarle económicamente porque, ha aclarado, «no es la finalidad del Ayuntamiento», si bien se ha mostrado favorable a que las Sociedades Anónimas Deportivas cumplan con la Ley como cualquier empresa.
En este sentido, y ante la situación de algunos equipos que mantienen deudas con la Seguridad Social, la Agencia Tributaria o los jugadores, Román ha declarado que podría producirse «un agravio comparativo» con el Guadalajara si los otros afectados no recibieran semejantes expedientes sancionadores.