En torno a medio centenar de agricultores se han concentrado este martes en Toledo frente al Palacio de Fuensalida, sede de la Presidencia de Castilla-La Mancha, para protestar por el desvío de fondos del Programa de Desarrollo Rural (PDR) a otros fines que no son la agricultura y la ganadería.
En la concentración, que ha sido convocada por Unión de Uniones de Castilla-La Mancha y por la Plataforma en Defensa de la Agricultura y Ganadería Ecológicas, los concentrados han rechazado que una parte del dinero contemplado en el PDR no se esté destinando a medidas de apoyo a la agricultura y ganadería, sino a la empresa pública Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam).
«5.000 agricultores han dejado la agricultura ecológica»
El presidente de Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, Andrés García Vaquero, ha recordado que el PDR supone un 25 % de la Política Agraria Común (PAC), pero una parte de los fondos se está trasvasando a Geacam en vez de destinarse a medidas de apoyo a la ganadería y la agricultura.
Este trasvase está haciendo que no haya fondos para aplicar todas las medidas contempladas en el PDR, lo que ha originado que hayan dejado la actividad unos 5.000 agricultores dedicados a la agricultura ecológica, un 80 % de los apicultores, o que sólo reciban ayudas dos de las 17 ganaderías que tienen ovejas de la raza roya bilbilitana, en peligro de desaparición.
Esos fondos contribuyen a que queden agricultores y ganaderos en los pueblos, pero si se van mermando las ayudas acaban por dejar la actividad, ha lamentado García Vaquero, quien ha sentenciado: «El despoblamiento se va generando desde la propia Administración con las políticas que se hacen».
Utilización de los fondos
Los concentrados no sólo han cuestionado el trasvase de fondos, sino su utilización, ya que como ha comentado el presidente de la Plataforma de Defensa de la Agricultura y Ganadería Ecológicas, Anastasio Yébenes, «no es de recibo» que Geacam haga tratamientos selvícolas en 11.000 hectáreas de monte con un presupuesto de unos 70 millones de euros, lo que supone 7.000 euros la hectárea.
En cambio, si un agricultor tiene una zona de monte y quiere hacer un tratamiento selvícola lo máximo que le van a dar, si es que se lo dan, son 1.200 euros por hectárea y un máximo de 40.000 euros por titular, ha apuntado Yébenes, quien ha aseverado: «Hablan de criterios medioambientales y tienen el cuajo de dejar 200.000 hectáreas de agricultura ecológica sin ayudas».
«Se les hace muy difícil justificar lo que están haciendo, no tiene ninguna justificación», ha considerado Yébenes, que ha recordado que e 2023 se publicó el presupuesto del PDR, en el que está incluido el presupuesto de la agricultura ecológica, para la que presupuestaron 160 millones de euros cuando ya se estaban certificando 408.000 hectáreas.
Era un dinero insuficiente que iba a echar a la mitad de los agricultores que practican la agricultura ecológica, como finalmente ha ocurrido, ha señalado el presidente de la plataforma, que se ha preguntado: «Si en el periodo 2008-2014 Castilla-La Mancha ya gastaba 57 millones anuales en agricultura ecológica cómo es posible que en 2023 sólo se prestaran 32 millones para cada año».
Finalmente, han quedado sin ayudas 5.000 agricultores y 200.000 hectáreas de agricultura ecológica, ha recalcado Yébenes, que ha señalado que Andalucía ha tenido un problema parecido, porque había muchas solicitudes, pero lo ha corregido poniendo otros 150 millones de euros.
Así, Andalucía ha presupuestado 353 millones de euros para cinco años, a una media de 70,6 millones anuales y en Castilla-La Mancha 160 millones en el periodo a una media de 32 millones al año, con el fin de «cuadrar el presupuesto de Geacam con dinero que tenía que ir a la agricultura y la ganadería», ha mantenido Yébenes