El consejero de Agricultura de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha valorado que la Comisión Europea haya aprobado una prórroga para el programa de apoyo al sector del vino, sobre todo porque la PAC finaliza en 2020 y con esta medida se genera un «compromiso jurídico».
En unos archivos sonoros remitidos por la Junta, Martínez Arroyo, que se ha reunido en Bruselas el jefe de la Unidad responsable de los temas de Vino, Joao Onofre, ha subrayado la importancia de esta prórroga, pues supone que «hay un compromiso jurídico por parte de la Comisión Europea de que el vino tenga un programa específico de apoyo» y ha defendido que «debe tenerlo, porque es un sector muy distinto al resto de sectores agroalimentarios».
«Lo importante es que la Comisión Europea ha sido valiente dando el paso de prorrogar el programa de apoyo al sector vino más allá de 2020, sin que haya presupuesto, pero dando garantía jurídica a los estados miembro», ha valorado Martínez Arroyo, que ha recalcado que, hasta el momento, el vino «es el único sector que en estos momentos tiene esa garantía».
En el encuentro, también se han expuesto las propuestas que lleva a cabo Castilla-La Mancha para planificar el sector del vino, entre las que se encuentran la potenciación de la calidad de la uva en la reestructuración del viñedo y la disminución del rendimiento medio por hectárea.
El consejero también ha trasladado a Onofre las prioridades de Castilla-La Mancha para la nueva línea de reestructuración de viñedo, que se convocará en 2017, en la cual que se «cambia radicalmente» el concepto desarrollado hasta ahora, ya que se da prioridad a los proyectos que diferencien en el pago de la uva a los viticultores y la apuesta por los jóvenes.
En este sentido, Martínez Arroyo ha propuesto a la UE que el apoyo a la incorporación de jóvenes agricultores sea un objetivo prioritario en todo el sector agrícola europeo.
Por otro lado, ha recordado que el programa de apoyo al sector del vino presenta una línea específica de promoción y sobre este punto ha explicado que ha pedido a Onofre que se simplifiquen las burocracias que deben superar las empresas para beneficiarse de estas ayudas a la hora de participar en actividades de promoción en países de fuera de la UE.
Martínez Arroyo ha indicado que en Castilla-La Mancha ya se ha simplificado la normativa sobre este tema y ha pedido a la UE que también lo haga.
«Para nosotros, la promoción es fundamental. Cuanto más vino embotellado y envasado se vende fuera, más riqueza se genera», ha sostenido el consejero, pues ha informado de que la relación es de 5 euros a 1 en función de si se vende vino envasado o a granel, aunque ha recalcado que «todo es necesario».
Asimismo, ha señalado también que el programa de apoyo al sector del vino también cuenta con una línea específica para la eliminación de subproductos a través de la destilación y ha destacado que Castilla-La Mancha es la región que más fondos recibe de esta partida, ya que recibe la mayor parte de orujos y lías que se producen en el país.