Asaja Castilla-La Mancha va a pedir a la Consejería de Agricultura y a la Agencia de Información y Control Alimentario (Aica) un mayor control de trazabilidad para que la uva se pague al precio «que merece», pues no toda la uva «puede valer igual» y se tiene que reconocer «el esfuerzo en calidad» que hacen las denominaciones de origen.
Así lo ha anunciado hoy en Toledo vicepresidente regional de Asaja, Florencio Rodríguez, que ha comparecido en rueda de prensa junto a la también vicepresidenta y responsable de Asaja en Toledo, Blanca Corroto, para hablar sobre la evolución de la campaña de vendimia y la situación actual de los precios de la uva.
[ze_summary text=»Los agricultores que están haciendo las cosas bien verán recompensado sus esfuerzos»]Los agricultores que están haciendo las cosas bien verán recompensado sus esfuerzos[/ze_summary]Tras destacar que éste va a ser un «año bueno en calidad de vinos», pese a una merma en la producción del 30 por ciento con respecto a la campaña anterior, ambos dirigentes han tachado de «vergonzoso» que, a estas alturas, «no haya aún precios de la uva» y los agricultores no sepan a cuánto se les va a pagar.
Dicho esto y refiriéndose a los precios que sí ha dado a conocer ya Bodegas Félix Solis, Rodríguez ha abogado por que la uva se pague «al precio que merece» porque solo, de esta forma, «los agricultores que están haciendo las cosas bien verán recompensado sus esfuerzos».
En este mismo contexto ha anunciado que esta misma semana Asaja Castilla-La Mancha va a presentar un escrito ante el Tribunal de la Competencia para que haga un análisis de situación ante la posible irregularidad que podría estar produciéndose, a nivel nacional, en algunas bodegas que están fijando precios iguales o similares.
Y ha recalcado que, en el sector vitivinícola, tanto a nivel nacional como regional, «se tienen que mejorar muchas cosas y cuánto mayor control de trazabilidad y de calidad de vinos exista, mucho mejor para los agricultores y para el consumidor».
En este punto ha criticado que lo que no es de recibo es que en los lineales de los supermercados haya botellas de vino de crianza, reserva y gran reserva a 1,10, 1,15 o 1,20 euros, y ha insistido: «no es correcto, no todo vale igual porque no todo es igual».
Así, ha estimado que los precios de la uva tienen que estar «en función de las variedades y de la calidad», ha subrayado que hoy por hoy la excelencia está en las denominaciones de origen y «no es normal que bodegas de estas zonas estén pagando la uva de mesa al mismo precio de la chardonnay».
Y ha recalcado que «no es lógico que después del esfuerzo que está haciendo Castilla-La Mancha en materia de reestructuraciones, inversión y trabajo por parte de los enólogos, sigamos siendo la región que tienen un precio más bajo del vino» y que, según las estimaciones de Asaja, debería ser «un tercio mayor o el doble» del actual.
A este respecto ha aplaudido la idea lanzada por el actual consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, de hacer un Plan de Trazabilidad, pero «para poner a los vinos y a los precios de la uva en su sitio, hay que actuar ya», ha sentenciado Rodríguez, quien ha indicado que pedirá explicaciones a la Consejería sobre la puesta en marcha del citado plan.
Por otro lado, el vicepresidente de Asaja y secretario provincial de esta organización agraria en Ciudad Real ha indicado que actualmente, de las 416.000 hectáreas dedicadas al cultivo de la viña, 200.000 son de regadío, lo que sitúa a Castilla-La Mancha en la quinta región en regadío.
Dicho esto, ha argumentado que, aunque en esta comunidad, donde hay siete cuencas hidrográficas, «se puede aprovechar mejor el agua porque necesitamos infraestructuras», el objetivo es «hacer un equilibrio entre la producción de uva de regadío y de secano, pero priorizando esta última, porque si no desaparecerá en los próximos años», ha vaticinado Rodríguez.