La Junta de Castilla-La Mancha ha levantado las últimas restricciones que seguían vigentes para limitar los movimientos de ganado a causa de la viruela ovina y caprina.
«Con esta publicación, damos por erradicada la enfermedad y será ya a mediados de noviembre cuando España consiga recuperar el estatus de país libre frente a la viruela ovina y caprina», ha asegurado el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta, Julián Martínez Lizán. El propio consejero ha mandado un mensaje de agradecimiento al sector por los momentos que se han vivido desde que apareció la enfermedad. «En un año hemos conseguido terminar una enfermedad que no aparecía en nuestro país desde 1968», ha subrayado Martínez Lizán.
11,5 millones en ayudas, indemnizaciones y controles
Durante el brote de viruela y caprina se han tenido que sacrificar miles de animales. La Junta ha pagado 11,5 millones de euros para paliar la enfermedad. De los 11,5 millones, 4,75 millones han sido para apoyar a los ganaderos a la hora de cubrir los gastos del sacrificio del ganado; 1,1 millones se han destinado a las empresas encargadas del sacrificio y la destrucción de los animales, y 600.000 euros más al control veterinario de las explotaciones.
Desde la Consejería de Agricultura afirman que ya se han presupuestado otros cinco millones de euros en ayudas para reponer a los animales reproductores para que las explotaciones puedan recuperar la normalidad.