Un centenar de ganaderos de vacuno de leche se ha concentrado este viernes en la plaza de Zocodover, de Toledo, para pedir un precio justo que se sitúe por encima de los costes de producción, como establece la ley de la Cadena Alimentaria.
En el acto de protesta, convocado por Asaja de Castilla-La Mancha, han asistido aproximadamente la mitad de los 200 ganaderos de vacuno de leche que hay en la comunidad autónoma y se han repartido botellas leche fresca entre los transeúntes.
Principalmente, han demandado unos precios que les permitan mantener la viabilidad de sus explotaciones
«Vacuno de leche en peligro de extinción»
Durante dos horas y media, entre las 11.30 y las 13.00 horas, los concentrados han permanecido frente a la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, con pancartas en las que figuraban lemas como «Vacuno de leche, en peligro de extinción», «Distribución: los yogures llevan leche», «Agua, leche, mismo precio», «Industria, no dices la verdad», «Ni un litro por debajo de costes», «SOS Ganadería» o «Distribución, no engañes al consumidor»
Los participantes en el acto reivindicativo han demandado a la Administración que haga cumplir lo establecido en la ley de la Cadena Alimentaria, ya que las empresas les siguen pagando muy por debajo de los costes de producción, según ha determinado el recientemente creado Observatorio de Precios de Castilla-La Mancha, ha señalado la vicepresidenta de Asaja de Castilla-La Mancha, Blanca Corroto.
Según ha explicado Corroto, el Observatorio de Precios ha determinado que el ganadero perderá dinero con todo lo que se pague por debajo de 39 céntimos por litro de leche, y «a día de hoy, las cuatro empresas lácteas que operan en la región están pagando por debajo de ese precio».
En este sentido, ha comentado que hay una empresa láctea que compra bastante leche en la comarca de Talavera de la Reina, en la que se concentra la mayor parte del vacuno de leche de Castilla-La Mancha, que está pagando este mes a un precio medio de 37,60 céntimos, aunque el mes pasado la estaba adquiriendo a 34 céntimos el litro.
Y ha añadido que a comienzos del año 2021 las lácteas empezaron pagando 32 céntimos el litro de leche, aunque fueron subiendo gradualmente desde que Asaja inició las movilizaciones para pedir precios más acordes en octubre del pasado año.
La Cadena Alimentaria
Pero «aún estamos lejos», ha admitido Corroto, que ha señalado que «ahora mismo un ganadero de leche sigue perdiendo dinero con todo lo que sea por debajo de 41 céntimos el litro de precio base», porque los costes de producción se han incrementado mucho, por lo que sus explotaciones están abocadas a desaparecer, ha advertido.
Fotos: los ganaderos se concentran en Toledo por el precio de la leche
«Queremos decir a la Delegación del Gobierno que se cumpla la ley de la Cadena Alimentaria, que no sea otro humo más, y que ellos si que tienen mucho que decir porque al contar ya con un Observatorio de Precios que certifica que por debajo de 0,39 céntimos no se puede vender, que hagan cumplir la ley», ha enfatizado Corroto.
Ha añadido que la leche prácticamente vale lo mismo que un litro de agua, lo que no es justo con todo lo que lleva al proceso de la leche.
«Los ganaderos lo están pasando muy mal»
Por su parte, el secretario general de Asaja de Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha afirmado que «no podemos entender como la industria y la distribución pueden tener cómplices como puede ser las administraciones», porque están dando grandes subvenciones a las industrias de las ayudas Focal y del plan de incentivos regionales sin que se les exija que paguen unos precios adecuados al productor.
A juicio de Fresneda: «No se puede entender que, si hay una ley de la Cadena Alimentaria, que dice que hay que pagar a los ganaderos y agricultores como mínimo el equivalente a los costes de producción» se estén pagando estos precios y se ha preguntado: «¿Cómo puede ser que todo el mundo esté mirando de perfil?».
Al igual que Corroto, Fresneda ha aseverado que «los ganaderos lo están pasando muy mal» y ha avisado de que la situación va a ser peor, porque la sequía va a encarecer los precios de los piensos», al tiempo que ha vaticinado que «se avecina una pandemia de abastecimiento y alimentación, porque se está masacrando al sector productor».
En este contexto, ha considerado que «la ciudadanía tiene que entender que detrás de un yogur, de unas natillas, de un cartón de leche, de cualquier producto lácteo que se venda en las grandes superficies, hay un ganadero y hay una vaca.
Ha lamentado «lo que está pasando en España con la ganadería, que está sufriendo ataques brutales del sector conservacionistas y de los grandes lobys de la comercialización»