El Gobierno de Castilla-La Mancha ha convocado ayudas por valor de 300.000 euros para subvencionar los costes que generan las actividades del control del rendimiento lechero en la región.
El objetivo es contribuir a una mayor eficiencia de los animales productores, mejorar la competitividad de las explotaciones ganaderas y reducir los efectos ambientales de la producción de leche, disminuyendo el consumo de insumos -elementos que toman parte en la producción de otros bienes- y las emisiones contaminantes que se puedan producir, ha explicado la Consejería de Agricultura en una nota de prensa.
La convocatoria se ha publicado este jueves en el Diario Oficial de la región y las solicitudes pueden presentarse en un plazo de 20 días a contar desde este viernes.
Se podrán beneficiar de estas ayudas las entidades de control de rendimiento lechero y las asociaciones u organizaciones de criadores determinadas en la orden.
También en nota de prensa, la Consejería ha informado de la reunión que ha mantenido este viernes el director general de Ordenación Agropecuaria, Joaquín Cuadrado, con responsables del Laboratorio Interprofesional Lácteo de Castilla-La Mancha (Lilcam), ubicado en Talavera de la Reina (Toledo).
Un laboratorio que tiene «un papel importante para el normal funcionamiento del sector lácteo regional», puesto que su mayor actividad, ha explicado Cuadrado, consiste en analizar las muestras de todos los movimientos de leche en Castilla-La Mancha.
Otra actividad que realiza es analizar las muestras del control lechero que se hace en las ganaderías de la región, para la cual el Lilcam recibe una ayuda directa del Gobierno regional que hace posible realizar más de 330.000 controles al año, algo «necesario para que todo el sector en su conjunto siga siendo competitivo», ha afirmado.
Además, el director general ha destacado la importancia del análisis de muestras de leche individual de cada una de las hembras en control, pues los resultados se incorporan a las valoraciones genéticas, posibilitando el progreso genético de toda la raza, la mejora constante de los parámetros tecnológicos y de la calidad de la leche producida y la capacidad para responder a las demandas del mercado.