Desde este 7 de agosto, las restricciones para el movimiento del ganado ovino y caprino en Castilla-La Mancha, según la última resolución de Comisión Europea. La decisión supone una relajación de las normas que entraron en vigor después del aumento de casos de viruela ovina y caprina en este 2023. Las limitaciones se habían ido retirando progresivamente y ahora estaban activas limitaciones en zonas de Ciudad Real y Toledo.
De este modo, a partir de ahora se levanta la zona de vigilancia para «permitir el movimiento de animales desde la zona de restricción adicional, que abarca a las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, hacia zona libre no sólo para su sacrificio inmediato en matadero, sino también con destino para vida hacia explotaciones de producción y cebaderos», como explica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Para poder mover el ganado, desde ahora será necesaria que una inspección médica certifique que los animales no sufran la enfermedad desde 30 días en origen y destino.
Se mantiene la restricción de animales en algunas zonas
La fecha que marca el Ministerio para la eliminación total de las restricciones es el 25 de septiembre. Así, continúan activas las restricciones de movimientos de animales en las zonas de limitaciones adicionales. En el caso de que a 25 de septiembre no se notificasen más casos de viruela, se levantaría esta última medida.