El secretario general de Asaja de Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha considerado que el 80 por ciento de las bodegas de la región que están comprando uva para hacer vino cometen irregularidades y ha animado a los productores a denunciarlas a los organismos pertinentes.
En rueda de prensa, Fresneda ha asegurado en hay un alto porcentaje de bodegas de la región que están llevando a cabo prácticas irregulares como no fijar precios, no tener contratos o no pagar la uva a los treinta días de ser entregada, como establece la ley de morosidad al ser un alimento perecedero.
Fresneda ha animado a los productores a denunciar estas prácticas y les ha recomendado: «que denuncien, que no tengan miedo, que están amparados por la ley», porque «todo esto ayuda para resolver el problema».
En este sentido, ha expresado su satisfacción porque la Agencia de Información y Control de Alimentos (AICA) ha comunicado su disposición a comenzar a controlar al sector vitivinícola, como ha solicitado la organización agraria.
El secretario regional de Asaja ha recordado que el AICA tiene plena capacidad para investigar y proponer sanciones por incumplimiento de la ley para alimentos y materias primas que se conviertan en alimentos.
Pero para que el AICA comience a actuar tiene que ser demandado por cada sector interesado, de forma que este organismo está realizando controles en los mercados del aceite y de los lácteos y se está preparando un protocolo para introducir también las frutas y hortalizas, ha señalado Fresneda.
Ahora parece que va a extender también su actividad al sector vitivinícola, ha apuntado el secretario general de Asaja de Castilla-La Mancha, que ha recordado que el AICA puede por denuncias o bien de oficio para vigilar la relación comercial de agricultores y cooperativas con bodegas privadas.
En este sentido, ha informado que entre las sanciones que pueden ponerse figuran multas de 3.000 euros, si no se reflejan los precios y si se retardan los pagos pueden llegar hasta 100.000 euros.