El alcalde afirma que el expediente de regulación temporal de empleo planteado por la entidad que engloba a la antigua CCM es un «golpe muy duro para Cuenca» y quiere reunirse con el presidente de Liberbank y Cospedal.
El alcalde de Cuenca, Juan Ávila, ha pedido a presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, que «medie» ante el Grupo Liberbank para que se corrija un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que, en su opinión, «es discriminatorio para Castilla-La Mancha y para Cuenca». Con este fin, el primer edil conquense ha enviado hoy, 17 de junio, dos cartas: una al presidente de Grupo Liberbank, solicitándole una entrevista a fin de expresarle el malestar de los conquenses ante la regulación planteada; y una segunda a Cospedal, pidiéndole que le acompañe a la esta reunión.
Ávila, que ha estimado que el ERTE de Liberbank puede afectar a unos 90 puestos de trabajo en la capital, además de las reducciones salariales que sufrirán el resto de empleados; considera la medida «un nuevo golpe para la ciudad de Cuenca» y ha afirmado que «no podemos aceptarlo sin más».
Para el alcalde, no es un expediente «equitativo» pues «sus consecuencias son mucho más graves para Castilla-La Mancha que para Asturias o Extremadura». Algo que ha achacado a la posición que han tomado los gobiernos autonómicos de estas comunidades para defender los puestos de trabajo en su territorio. «Cuenca y Castilla-La Mancha necesitan de la implicación rotunda y firme del Gobierno regional, como han hecho Extremadura y Asturias», ha aseverado Ávila. De ahí que haya vuelto a instar a Cospedal a «intervenir» para solicitar al Grupo Liberbank que retome las negociaciones con los representantes de los trabajadores a fin de hacer un planteamiento «menos dañino» para el empleo en la región y especialmente en la capital conquense.
OTRO GOLPE MÁS PARA CUENCA
Ávila considera que el ERTE de Liberbank va a suponer «un nuevo golpe para la economía de Cuenca». En este sentido, ha recordado que «son ya muchas las personas que han perdido su puesto de trabajo en Cuenca como consecuencia del cierre de empresas y, sobre todo, de los recortes del Gobierno de Castilla-La Mancha en la sanidad y la educación».
En definitiva, el alcalde ha afirmado que el planteamiento «inaceptable» del Grupo Liberbank «empobrece a Cuenca aún más».