La producción vitivinícola ha bajado un 40 por ciento sobre 2013 por la falta de precipitaciones en la denominación de origen Jumilla, cuya vendimia ha comenzado a principios de mes en la zona de Albacete y que arrancó en la segunda quincena de agosto en el área perteneciente a la región de Murcia.
Según un comunicado de esta denominación, la escasez de agua ha evitado el desarrollo de plagas en la vid, sobre todo de las que tienen su origen en hongos, y ha provocado que la uva esté en un estado sanitario «muy bueno».
El consejo regulador de la D.O. asegura que la calidad de la uva es muy buena por buena maduración, por lo que se espera gran calidad de los vinos que procedan de esta campaña
Tanto en la zona murciana como albaceteña las variedades que primero se han vendimiado han sido las blancas y las tintas, tales como syrah, merlot y tempranillo, con las que empezará a elaborarse el vino en casi todas las bodegas jumillanas del 10 al 15 de este mes.
La uva monastrell, la de mayor porcentaje de producción en la D.O. Jumilla, será la variedad que más tarde comience a ser recolectada y, dependiendo de la zona, variará entre mediados de septiembre y principio de octubre.
Para el consejo regulador, la escasez o nulas precipitaciones que se han dado esta campaña repercutirá en una menor producción, sobre todo en viñedos de secano.
Se espera una producción de en torno a un 40 % menos que en 2013, año en que la producción se incrementó debido a la abundancia de precipitaciones, y de alrededor de un 20 % menos que la media de una campaña normal.