Las gasolineras de Castilla-La Mancha han vendido un 8,4 por 100 menos de combustible durante el mes de mayo en comparación con abril, y después de que el 1 de mayo entrara en vigor la norma por la que se ha doblado el denominado «céntimo sanitario» en la región. En declaraciones a Efe, la presidenta de la Federación Castellano-manchega de Estaciones de Servicio (Fecamaes), Isabel Rodríguez, ha tachado de «fracaso auténtico» la medida del Gobierno regional por la que se ha doblado el céntimo sanitario en la comunidad y que supone gravar los carburantes con un 0,048 euros por litro de combustible.
Rodríguez ha criticado la medida, ya que «lejos de suponer una mayor recaudación de impuestos, con las subidas la gente se retrotrae, compra menos y, por lo tanto, la recogida de impuestos es menor».
Las repercusiones de esta subida de impuestos y consiguiente caída en las ventas son «catastróficas» para las estaciones de servicio, pues Rodríguez ha dicho que los usuarios, si tienen ocasión, llenan sus depósitos en la Comunidad de Madrid, donde el impuesto sobre los carburantes no es tan elevado.
Por este motivo, la subida del céntimo sanitario es «injusta», sobre todo si se compara con otras comunidades autónomas que no lo han hecho.
En los últimos tres años, las caídas en las ventas en las estaciones de servicio de Castilla-La Mancha suman un 35 por 100 -sin tener en cuenta el descenso del último mes-, por lo que Rodríguez ha advertido de que el sector está «excesivamente tocado».
Estas caídas han provocado incluso el cierre de algunas estaciones de servicio y ha aportado el dato de la provincia de Ciudad Real, donde se han cerrado 11 gasolineras en cuatro años, o de la Autovía de los Viñedos, una vía en la que se abrieron tres y solo queda una en funcionamiento.