La entidad sigue trabajando en un proyecto claro de formación de nivel y motivación de sus directores de oficina, para aumentar la calidad de la atención a sus socios y clientes y seguir ofreciendo el mejor servicio en todo su ámbito de actuación.
Así quedó patente en una sesión formativa impartida esta semana en Toledo por la División Comercial de la cooperativa de crédito a un grupo de directores de oficina, en la que intervino de manera muy activa el director general de Caja Rural Castilla-La Mancha, Víctor Manuel Martín López.
En ella se destacó la necesidad de ir perfeccionando día a día las capacidades, conocimientos técnicos y habilidades comerciales de los directores de oficina, incidiendo en la importancia de contar con una amplia y cualificada oferta formativa que se pone permanentemente a disposición de todos los empleados/as de la entidad.
La formación impartida a éstos incidió, sobre todo, en aspectos técnicos y de motivación para abordar la etapa que queda hasta final de año con fuerza y competitividad, así como para ayudar a la captación y comprensión de las inquietudes y verdaderas necesidades de los clientes de Caja Rural Castilla-La Mancha.
Martín López subrayó la importancia que tienen para la Caja los directores de oficina, siempre teniendo como referencia la atención a los clientes, de los que día a día se ganan su lealtad y confianza logrando relaciones duraderas y estables.
Por ello, el director general transmitió a los directores la importancia de que cada nuevo día represente para ellos un magnífico reto profesional y personal, a fin de conseguir las metas marcadas por la entidad y las propias expectativas individuales de conseguir un alto nivel de rendimiento y preparación.
Apeló a su implicación, ilusión y esfuerzo para seguir creciendo en un entorno complejo donde, dijo, «siguen esperándonos nuevas oportunidades».
Por último, felicitó a los directores por los resultados obtenidos y les animó a afrontar los próximos retos «trabajando con tesón y oficio bancario».