El Gobierno de Castilla-La Mancha ha recibido un préstamo de 40 millones de euros de Caja Rural Castilla-La Mancha para afrontar obligaciones pendientes de pago en materia, por ejemplo, de fomento del autoempleo o alquileres sociales. Según ha dado a conocer el Gobierno regional, ese dinero también se destinará a programas de apoyo al deporte y al patrimonio artístico y museos, a planes de eficiencia energética, a pensiones no contributivas y a ayudas a la inversión y competitividad de las empresas.
El consejero de Hacienda del Gobierno de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha firmado el préstamo con el presidente y el director general de Caja Rural Castilla-La Mancha, Andrés Gómez Mora y Víctor Manuel Martín López. Romaní ha asegurado que el rigor y el saneamiento de las finanzas «nos permiten continuar con el proceso de reducción de la morosidad pública, mediante la conversión de deuda comercial en financiera».
El Gobierno regional sostiene que con este préstamo podrá continuar pagando las obligaciones pendientes de pago fruto del desequilibrio de tesorería que dejó el anterior Gobierno socialista. El consejero ha señalado que la firma de este préstamo pone de manifiesto «la confianza y credibilidad recuperadas por el Gobierno regional con las entidades bancarias, fruto de la gestión responsable llevada a cabo por el Ejecutivo que preside María Dolores Cospedal».
Por último, el consejero de Hacienda ha querido agradecer la colaboración y el apoyo mostrado por Caja Rural Castilla-La Mancha, «en la tarea de reducir la morosidad pública de la región».