Caja Rural de Castilla-La Mancha afronta 2015 con la «solvencia y la seguridad que genera un sólido balance», tras cuatro años en los que la entidad financiera ha incrementado su plantilla en más de doscientas personas y multiplicado casi por dos su red de oficinas.
En un comunicado, la entidad financiera ha destacado que ha aprovechado «con intensidad» las oportunidades que han surgido en los últimos ejercicios gracias a un «sólido balance», que supera los 6.000 millones de euros, y que contaba, en septiembre de 2014, con unos recursos propios computables de 325 millones de euros, lo que proporciona un ratio de capital del 12,21 por ciento.
En virtud de la liquidez inmediata que posee, y que en noviembre ha registrado 1.300 millones de euros, Caja Rural ha destacado que la entidad ha contribuido a dinamizar el territorio y atender los requerimientos y necesidades de particulares y administraciones públicas.
Así, durante 2014 Caja Rural Castilla-La Mancha ha aumentado su inversión crediticia y ha batido el récord en número de operaciones concedidas.
Otro de los «sólidos pilares» de la entidad es el bajo ratio de mora que posee, que en noviembre se situó en el 3,36 por ciento, cuando el resto del sector financiero del país según el supervisor alcanzaba en octubre el 12,92%.
El servicio cercano y profesional que proporciona a su amplia base de socios y clientes ha permitido igualmente experimentar un crecimiento significativo tanto en número de clientes como en nuevos puntos de venta por todo su ámbito de actuación.
Así, la entidad cuenta ya con más de 400.000 clientes a noviembre 2014.
Esta posición de solvencia y liquidez ha posibilitado a la entidad continuar su Plan de Expansión, que le ha permitido abrir oficinas y agencias financieras por todo su ámbito de actuación.
En este sentido, actualmente la caja tiene 367 oficinas distribuidas por todo su ámbito de actuación que incluyen Castilla-La Mancha, Madrid y Ávila.
Como cooperativa de crédito que cumple un fin social y revierte parte de sus beneficios en el territorio, Caja Rural Castilla-La Mancha ha atendido a las organizaciones sociales, humanitarias y ONG’s mediante iniciativas solidarias, de forma que ha cerrado 2014 con un positivo balance de 40 actividades y más de 13.000 beneficiarios.
En virtud de todos estos números e iniciativas que demuestran la «eficaz gestión emprendida», Caja Rural Castilla-La Mancha encara el nuevo año con la seguridad que confiere su «sólido balance» y con la intención de «continuar dando forma a nuevos proyectos que optimicen aún más los servicios que proporciona y se adapten a las crecientes necesidades derivadas de su nueva dimensión».
Asimismo, 2015 será un año especialmente significativo para la caja, ya que celebra el 50 aniversario de su constitución.