El sindicato CCOO ha presentado más de 60 alegaciones al anteproyecto de la nueva ley de Caza de Castilla-La Mancha porque, tal y como advierte, su aprobación supondría «una significativa amenaza para el medio ambiente y para la caza tradicional de las zonas rurales».
En un comunicado, CCOO ha alertado de que la normativa propuesta «degrada la actividad cinegética tradicional en beneficio de una visión productivista» y avisa de que «desatiende la protección del medio ambiente y la conservación de los espacios cinegéticos».
El responsable regional de los agentes medioambientales de CCOO, Luis Roa, indica también que la normativa «desregula actuaciones profundamente dañinas para el medio ambiente» como la colocación de cebos envenenados o la posesión de medios prohibidos para la caza.
Y «disminuye o incluso elimina las sanciones y los actos prohibidos que ya había asumido la sociedad», ha añadido.
«Una modificación de la vigente ley y no una nueva redacción hubiese sido más beneficiosa para la sociedad, que observa con preocupación cómo en cada legislatura se reconfigura totalmente la normativa, hecho que consideramos muy perjudicial para una buena administración pública y un desarrollo económico saludable», ha afirmado.
Por otra parte, Roa ha denunciado que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha evitado «todo debate público» sobre la normativa y no ha consultado a los agentes medioambientales ni a las organizaciones de la sociedad civil afectadas o implicadas en la actividad cinegética y la conservación del medioambiente.
Únicamente, ha apuntado, ha consultado con «el lobby de quienes se dedican a la explotación comercial de la caza».
Por ello, el sindicato ha presentado alegaciones a la práctica totalidad de los artículos, y disposiciones derogatorias y finales del anteproyecto de ley.