El pasado viernes 5 de abril la comisión negociadora del ERE de Asistencias Técnicas y Estructuras de Geacam acordó el desistimiento de dicho ERE, presentado por la empresa el 7 de marzo, tras anular el TSJCLM el ERE ejecutado previamente por Geacam.
La Federación Agroalimentaria de CCOO «valora positivamente esta decisión» en un comunicado. «No cabía alcanzar ningún otro acuerdo sobre un ERE que era incongruente y de dudosa legalidad y cuyo objetivo era despedir de nuevo a toda la plantilla, a la que Geacam acaba de volver a contratar en cumplimiento de la sentencia del TSJCLM (que, además, ha recurrido, o ha dicho que iba a recurrir)», añade el sindicato.
Tras desistir del nuevo ERE, Geacam anunció a CCOO «que presentará un nuevo ERE, del que esperamos mayor sentido común», agregan. «Como siempre, lo valoraremos en función de sus objetivos, de los datos y las propuestas, para explorar toda posibilidad de avanzar hacia algún acuerdo. No obstante, seguimos planteando que es difícil alcanzar acuerdos cuando se produce un solo despido, que en ningún caso podemos considerar objetivo, justo y justificado», señala José Sánchez de los Silos, secretario general de la Federación Agroalimentaria de CCOO CLM.
«A la vista de la documentación que se nos presentó para el ERE del que ahora se desiste, no existe causa objetiva económica, técnica u organizativa que lo justifique. Las causas que se arguyen apuntan más bien a situaciones sobrevenidas, provocadas por decisiones políticas del Gobierno injustas e injustificadas; y a la vez contradictorias», añade de los Silos.
«Las causas económicas tienen una especial dificultad de justificación mientras se mantiene a 75 trabajadores percibiendo sus emolumentos, con sus costes sociales incluidos, sin darles ninguna actividad laboral, es decir, eximiéndoles de asistir al trabajo», explica Sánchez de los Silos.
«Por nuestra parte», añade, «seguiremos como hasta ahora: apostando por medidas voluntarias y temporales al objeto de que Geacam siga siendo la empresa pública que tantos costó construir, que nadie nos regaló y que además tiene todo el sentido del mundo para una mejor y más correcta gestión de los recursos públicos»